Las cosas no le fueron del todo bien en Canarias: un pequeño problema de frenos, la excesiva degradación que experimentaron sus neumáticos, y, sobre todo, un par de pinchazos, desdibujaron la fotografía en la que se había enmarcado después de salir victorioso de la intensa lucha a tres bandas que protagonizó durante el Sierra Morena, en su debut a los mandos de un R5. Sin embargo, apenas una semana después, en la otra isla capitalina, Cristian García ha encarrilado de nuevo la situación, reencontrándose con la mejor versión de sí mismo. La misma que expuso por primera vez hace un año, cuando se marchó de Canarias, para sorpresa general, considerado ya como el favorito indiscutible a ganar el Nacional.
Esta vez, el zaragozano no ha ejercido una superioridad tan manifiesta como en 2016 a lo largo del periplo insular. Pero, igualmente, ha emprendido el viaje de vuelta hacia Península ubicado de nuevo al frente del campeonato, después de haber dominado con mano de hierro, del mismo modo que el pasado año, la segunda cita canaria del Campeonato de España. No obstante, este resultado está pendiente de una verificación del Departamento Técnico de la RFEdA. En concreto, de la válvula pop-off del Ford Fiesta R5 de RMC Motorsport. La verificación es de oficio y no se debe a ninguna reclamación. Este medio ha podido confirmarlo con la organización de la prueba.
Una vez constatado su dominio en los tramos de ayer, Cristian García y Eduardo González (con el que ha vuelto a formar equipo tanto en Gran Canaria como en Tenerife) han rubricado hoy una nueva victoria en las carreteras tinerfeñas que servirá al maño para encarar la primera prueba gallega del calendario con una mínima renta de 2,5 puntos sobre Iván Ares. El hombre que se ha postulado como máximo rival del aragonés en la lucha por el título durante estas dos citas atlánticas.
Surhayen Pernía, el otro integrante de esa lucha a tres bandas, fraguada en Córdoba, que parecía iba a marcar la tónica del Nacional, se ha descolgado a casi 30 puntos del dueto de cabeza una vez computados los rallyes canarios. Aunque este fin de semana, al contrario que en Gran Canaria, el motor de su coche ha rendido al cien por cien, el cántabro no ha sido capaz de encontrar el feeling adecuado con su i20 R5 para mantener un ritmo tan competitivo como el que mostró en Sierra Morena.
Después de alejarse irremediablemente de las primeras plazas en los compases iniciales de ayer, el piloto de Cóbreces no ha logrado cambiar la dinámica durante las especiales de hoy, y aunque parecía que había dado por fin con la tecla para la última sección, no ha podido evitar perder in extremis el cuarto puesto con Pedro Burgo. El único lucense que ha logrado terminar el rallye, después de que tanto Adrián Díaz como Sergio Vallejo hayan tenido que abandonar.
El local Enrique Cruz ha cumplido su objetivo de inmiscuirse entre los R5 del CERA con su Porsche 2010. Aunque le ha costado acostumbrarse a los nuevos neumáticos que obliga a montar ahora la RFEdA a los 911 GT3, el piloto del Copi Sport ha logrado un podio absoluto que restablece su moral después del batacazo anímico que le supuso la derrota en el Islas Canarias frente a Armide Martín, octavo clasificado en esta ocasión, por delante de Joan Vinyes y Álvaro Muñiz, vencedor entre los 2RM con su nuevo Abarth 124 R-GT.
Otro piloto de la isla, Víctor Delgado, se ha lucido también en los tramos de casa al volante del Peugeot 208 que ha alquilado a GC Motorsport, con el que vuelto a mostrarse imbatible, al igual que el pasado fin de semana, dentro de la categoría R2.
El tinerfeño ha ocupado, además, el segundo puesto entre los vehículos de tracción simple, por delante de Fran Cima, que ha encadenado con comodidad su segundo título consecutivo en el Trofeo Clio R3T Canarias, la división autonómica que ha vuelto a establecer Renault con motivo del periplo insular que ha culminado hoy el Nacional.
