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Pablo Suárez repite un año más en el Volant RACC, pero lo va a hacer como parte de un interesante programa creado por Monlau Repsol Technical School. La escuela barcelonesa ha creado este equipo para que sus estudiantes de Mecánica de Competición puedan hacer prácticas en un campeonato real como esta histórica monomarca.
Así, la asistencia de Pablo Suárez y su copiloto en esta nueva temporada, Israel Pereira, estará formada por cuatro estudiantes de primer curso de Mecánica de Competición de Automovilismo, uno de carácter fijo y tres rotativos. Asesorados por el personal docente de esta escuela, estos alumnos tendrán que hacer frente a todos los contratiempos técnicos que puedan surgir en el Peugeot 208 del dúo isleño.
Con una formación técnica en el ámbito del automovilismo de competición, Pablo Suárez ha encontrado un programa hecho verdaderamente a medida. Además, el hecho de contar con experiencia ya en esta copa monomarca, le permite ser ambicioso esta temporada. “Estoy muy ilusionado con la nueva unión a Monlau Repsol, es un orgullo que hayan querido contar conmigo y será un paso importante para poder afrontar con garantías la temporada. Su personal me facilitará mucho las cosas con su dedicación y dilatada experiencia en Motorsport”, afirma.
“Los alumnos de Monlau Repsol han elegido el proyecto y por ello confío en que tengan la misma ilusión que yo en él. Espero que lo sientan como suyo y le dediquen la pasión y actitud necesaria para que las cosas salgan bien y todos disfrutemos del proceso”, añade el grancanario, cuyos primeros pasos serios en competición fue en otra escuela, la de pilotos de DISA Copi Sport.
El coche ha sido preparado por técnicos, profesores y alumnos de Monlau y el responsable del proyecto y Team Manager va a ser Kike López, coordinador del área de estudios de automovilismo de esta escuela especializada. “Esta experiencia dará la posibilidad a nuestros alumnos de poner en práctica sus conocimientos teóricos en un marco real y en las mismas condiciones que se encontrarán en el futuro cuando se dediquen de forma profesional. Aunque el principal objetivo es formativo, a nivel deportivo trabajaremos al máximo en todas las pruebas para alcanzar el podio al final del campeonato”, afirma.
La temporada de esta monomarca empieza este fin de semana con la disputa del Rally La Pineda Platja, una primera prueba de asfalto tras la que vendrán, también en esta superficie el Rally Empordà y el de Osona para, tras el verano, tomar parte en el Rally Ciutat de Cervera, el Rally Vidreres y el Rally Torrefeta-Florejacs, los tres en tierra. Por último, el Rally 2000 Viratges culminará la temporada de nuevo sobre asfalto.
