Si el presupuesto se lo permite, la de 2011 puede ser la temporada de la consolidación de Bruno Magalhaes (julio de 1980, Lisboa) en el IRC. Tras abandonar en la primera cita por accidente, el triple campeón luso tiene previsto hacer siete de los once rallys que quedan. Entre ellos Canarias, Madeira y Azores –prueba en la que el pasado año logró el triunfo absoluto- son innegociables.
Los que saben de carreras aseguran que los rallys de estos tres archipiélagos tienen mucho en común, de manera que Bruno, que ya hizo un buen papel en Gran Canaria el pasado año, contará en las apuestas por el podio. Eso sí, su única victoria absoluta la logró en Azores sobre tierra. En el debut del rally dentro del calendario del IRC, Magalhaes tuvo problemas de transmisión y desgaste de neumáticos, pero acabó la carrera en cuarta posición. Peugeot decidió sacrificarlo a favor de Kris Meeke cayendo a la quinta plaza, pero a pesar de todo, fue su segundo mejor resultado de la temporada.
Este año el portugués llega con cero puntos en el casillero y la obligación de ser muy certero en aquellas pruebas en las que se inscriba. Le quedan siete cartuchos por quemar y un nuevo abandono sería funesto para sus opciones de mejorar el quinto puesto absoluto logrado en el IRC de 2010.
Piloto Peugeot
Como Jan Kopecky o Bryan Bouffier, Bruno Magalhaes es piloto de una sola marca, concretamente de Peugeot. Sus primeros pasos en el nacional luso de rallys lo hizo con un Ford Escort Cosworth (1999 y 2000), para las dos siguientes temporadas subirse a un Mitsubishi Lacer Evo VI de Grupo N. En 2003 no le importó dar un paso a atrás en cuanto a calibre de la mecánica para disputar el equivalente en España al Desafío Peugeot. Ese año fue segundo y, ya en 2004, campeón de esa ‘Fórmula Peugeot’.
Este resultado lo dejó en la órbita de la estructura oficial. Primero, las temporadas 2005 y 2006 con un 206 Súper 1.600, dándole a la marca un subcampeonato el primer año y, el siguiente, el título de la categoría. Carlos Barros, responsable de Peugeot Sport Portugal creyó que Bruno ya estaba maduro para irse a por el título absoluto y éste devolvió la confianza depositada con tres títulos nacionales consecutivos desde 2007 y hasta 2009.
Sus primeras incursiones en el IRC datan de la temporada 2006, como no, del Rally de Madeira. Ya entonces y con el Súper 1.600, se hizo con la cuarta posición. Una temporada más tarde lo mejoraría con un tercer puesto en Madeira, aunque abandonó en Italia. Tanto en 2008 como en 2009 sus participaciones se limitaban a las pruebas que se disputaban en suelo luso, pero la segunda plaza obtenida, de nuevo en Madeira acabó de convencer a su equipo de que Portugal se le había quedado pequeño.
La pasada campaña fue la primera con un programa completo dentro del Intercontinental Rally Challenge y se saldó con cuatro quintos puestos, un sexto, un séptimo, un décimo, un solo abandono (Madeira) y la victoria sobre tierra en el Rally de Azores.
Ya esta misma temporada, Bruno tuvo un difícil comienzo en Montecarlo, ya que sufrió una salida de carretera que le llevó al abandono. El piloto de Peugeot pudo quitarse ese mal sabor de boca con una buena actuación en el Rally de Portugal, la tercera cita del WRC disputada sobre tierra y donde Magalhaes cumplió su objetivo de ser el mejor de todos los pilotos lusos inscritos. Además, acabó en la duodécima posición absoluta llevándose la victoria de clase.
Buenos recuerdos
Canarias trae buenos recuerdos al tres veces campeón de Portugal. Aquí estuvo cerca del podio el pasado año y firmó la que se podría considerar su mejor actuación fuera de su país al ser quinto absoluto. “Espero este rally con muchas expectativas porque es una prueba que me gusta mucho y fue donde hicimos nuestro mejor papel fuera de Portugal. Tiene unas características parecidas a las del Rally de Madeira, como el asfalto muy abrasivo y limpio”, asegura.
Bruno, que en 2010 tuvo que ceder su cuarta posición a Kris Meeke, entonces piloto oficial de Peugeot UK, afirma que su intención es ir “lo más deprisa que podamos” para poder alcanzar “el mejor resultado posible”. “Hay gran cantidad y calidad de inscritos y es difícil hacer una previsión, pero estoy convencido de que el rally se va a decidir al segundo y que las diferencias van a ser muy pequeñas”.
Su jefe de equipo, Carlos Barros, comparte esa ambición, también animado por el buen recuerdo de una edición 2010 donde Bruno hizo un buen papel a pesar de la infinidad de problemas que sufrió. “Vamos a luchar por las primeras posiciones. Es una prueba donde estuvimos el año pasado y donde Bruno fue bien. Vamos convencidos de que alcanzaremos un buen resultado”, afirma el director deportivo de Peugeot Sport Portugal.
