Nos hemos puesto en la piel de un cliente tipo, con un target de edad media, familia entre tres y cinco miembros, trabajo ejecutivo, vida social activa e instalados en este largo y cansino estado coyuntural donde hay que medir con nuevo rasero cada una de las decisiones que afecten a la economía doméstica. Seguro que muchos se sienten identificados con es
ta situación. Los caprichos personales quedan relegados a un segundo plano y prevalece la lógica sobre otras consideraciones que ahora catalogamos de superficiales. El sector del automóvil no es ajeno a estas consideraciones. Por el contrario, se adapta con razonable antelación a estos ciclos temporales, fruto de un profundo estudio de las necesidades actuales de cada sociedad.
A nuestro modesto modo de entender, el nuevo Volkswagen Jetta nace en el epicentro de este cambio. En muchas ocasiones el cabeza de familia (y naturalmente, la parienta) necesita seguir manteniendo una imagen desahogada y moderna que se proyecte también a través del vehículo que conduce. Adaptado a sus necesidades reales de espacio, distinguido en el quehacer diario y versátil cuando afrontamos el resto de actividades en familia. El nuevo Jetta, como decíamos, aúna estas características pero además, podemos afirmar que es un coche económico y eficaz.
El Jetta se emancipa
Para ello, el nuevo Jetta inicia un nuevo camino en solitario para dejar de ser un Golf con maletero y convertirse en una elegante berlina que crece en tamaño y con un estilo moderno que da continuidad a las directrices empleadas por la marca en sus últimos lanzamientos, de formas sencillas pero muy atractivas. Ya sea por diseño, por equipamiento o por precio (23.670 euros) en la reinterpretación de este sedán con aires de grandeza confluyen nuevas virtudes que lo acercan a un estatus superior. Con nueve centímetros más de largo que la generación anterior o lo que 
es lo mismo, con 4,64 metros de longitud, todo es más sencillo. Su mayor distancia entre ejes influye directamente en el espacio disponible en el habitáculo, una característica que se hace especialmente evidente en las plazas traseras donde los pasajeros se encuentran muchos más cómodos. La capacidad del maletero también se beneficia de esta circunstancia alcanzado un volumen inusual en la categoría de 510 litros. Además el respaldo de los asientos traseros abatibles (40/60) permite aumentar este espacio.
La ambientación, al igual que el exterior, es de estilo sencillo pero muy elegante, sin grandes alardes de expresión para no desviar nuestra atención de lo realmente importante. Los detalles que marcan esta versión se personalizan en nuestra unidad de pruebas a través de insertos ‘Iridium’ en el cuadro de mandos, consola central y puertas, en los asientos de tipo deportivo tapizados en cuero, el volante multifunción revestido en este mismo material, ordenador de a bordo, radio CD con función mp3 con ocho altavoces, climatizador, sensor de luz y lluvia, y reposabrazos central delantero. Todo este equipamiento corresponde al acabado Highline, una alternativa que permite además distinguir su aspecto exterior mediante la utilización de una parrilla del radiador en negro con molduras cromadas, faros antiniebla delanteros y la inclusión de la luces de marcha diurna.
Motor 1.6 TDI CR 105 CV DSG7
El motor 1.6 TDI-Common Rail de 105 CV con transmisión DSG7 utilizado en esta unidad es un buen ejemplo del principio conocido como “downsized”. Si en entrar en mayores consideraciones y explicado de forma muy sencilla, se trata de buscar la mayor eficacia reduciendo el cubicaje del motor al tiempo que se mantiene altas cotas de rendimiento, sino juzguen ustedes mismos. Optimizadas sus variables gracias a la caja de doble embrague de siete velocidades, la cifra de consumo promedio se establece en 4,5 litros a los 100 km, comportándose como un mechero en recorridos extraurbanos con tan solo 3,9 litros a los 100 km. Su nivel de emisiones se sitúa por debajo de los 120 g/km, por lo tanto, exento del pago del impuesto de matriculación. Con estos antecedentes podemos decir que el Jetta ha supera con suficiencia el examen teórico. En la práctica, su comportamiento es alegre en cualquier circunstancia, si se lo pides, hasta rabioso, aunque fiel a su naturaleza tiende a la serenidad. Nos sorprendió la ligera dureza de sus suspensiones pero es que en su corazoncito también late sangre deportiva por lo que se agradece su aplomo y su agilidad sobre la carretera.
El nuevo Jetta equipa 6 airbags de serie: airbag del conductor y del acompañante, airbags laterales delanteros y airbags de cabeza delanteros. El equipamiento de seguridad se completa con el control de estabilidad (ESP) y asistente de arranque en cuesta y dirección asistida dependiente de la velocidad (Servotronic). Un conjunto acorde con las exigencias del momento del que ella puede presumir y del que él se sentirá orgulloso.
