Audi A8 Hybrid: lujo y compromiso

La escasa incidencia que está teniendo el vehículo eléctrico en este primer ciclo de comercialización da la razón a unos pocos visionarios que apostaron por el vehículo híbrido como paso lógico, en lo que a tenor de los hechos, se va a convertir en una larga, larguísima transición hacia la electrificación.

Toyota, como pionera en esta tecnología, tiene mucho ganado en esta carrera, tras la paulatina conquista de los segmentos con mayor volumen de ventas. Otros han decidido que su verdadero potencial se sitúa en aquellos clientes que acceden a sus berlinas más representativas. Es el caso de ejemplos como el BMW ActivHybrid 5 o el vehículo que hoy nos ocupa, el Audi A8 Hybrid cuya comercialización está prevista también para los primeros meses del 2012.

Audi ha desarrollado para esta versión un sistema en paralelo compuesto por el motor 2.0 TFSI y un motor eléctrico. El primero, de cuatro cilindros, tiene una potencia de salida de 211 CV con un par máximo de 350 Nm y combina toda la tecnología necesaria para maximizar su eficiencia: inyección directa de gasolina FSI, turboalimentación y el sistema de alzado de válvulas Audi valvelift. El eléctrico que además de funcionar como motor de arranque también actúa como generador en las fases de deceleración, cuenta con una potencia de 54 CV y 210 Nm de par durante cortos periodos de tiempo. Controlado electrónicamente, la gestión híbrida vigila la eficacia del cambio y la transmisión entre los diferentes modos de funcionamiento. Para ello el Audi A8 Hybrid dispone de un renovado cambio tiptronic de ocho velocidades que se encarga del funcionamiento preciso de todo el conjunto.

Todo este entramado tecnológico permite, por ejemplo, viajar a velocidades superiores a los 100 km/h empleando solamente la energía eléctrica o recorrer alrededor de tres kilómetros con cero emisiones circulando a una velocidad por debajo de los 60 km/h, ideal para el tránsito por la ciudad. Su eficacia traducida en cifras se manifiesta con consumos en ciclo estándar por debajo de los 6,4 litros a los 100 kilómetros y unas emisiones de CO2 de 148 g/km.

Elige el modo más idóneo

En función de las circunstancias del tráfico, de las características de la zona por donde se transita o simplemente atiendo a los deseos del conductor, este puede decidir el modo de funcionamiento en base a tres modos de conducción seleccionables mediante un botón situado en la consola o a través del empleo de la palanca del cambio automático. En modo ‘EV’ se da prioridad al uso del motor eléctrico, en modo ‘D’ el vehículo controla en cada momento la opción más eficaz en la combinación de ambos, mientras con el botón situado en modo ‘S’ y la posición tiptronic se favorece la acción conjunta de ambos motores para conseguir las máximas prestaciones. Circular con independencia en cada uno de ellos o en modo híbrido también es posible al igual que la recuperación y en modo de aceleración intensa (boost). El Audi A8 Hybrid cuenta además con sistema Start/stop que no infiere en el funcionamiento del aire acondicionado que sigue activo mediante un compresor que dispone de un pequeño motor eléctrico.

Cuando el conductor suelta el freno el vehículo inicia el movimiento en eléctrico pero si presiona el acelerador más allá de un cierto límite es el motor de combustión quien asume la responsabilidad de impulsar el vehículo. En aceleraciones más rápidas ambos motores funcionan conjuntamente mientras con el pedal derecho a fondo o en modo ‘S’, como antes explicábamos, el sistema híbrido suministra toda la potencia disponible, como si de un motor atmosférico se tratase pero con mucha mayor eficacia. En situaciones de deceleración, frenada o simplemente levantado el pié del pedal del acelerador el motor eléctrico funciona como generador.

Toda la información a la vista

Para que el conductor sepa cual es el modo de funcionamiento en cada momento, el tacómetro ha sido sustituido por un medidor de potencia que indica las diferentes etapas de la conducción híbrida mediante una escala porcentual. Una segunda información dividida en segmentos de color indican el modo de tracción utilizado por el vehículo y un indicador adicional permite conocer el nivel de carga de la batería de ion-litio.

Un A8 sin concesiones

El Audi A8 Hybrid mantiene el estilo característico de la berlina añadiéndosele las llantas de diez brazos en forma de turbina características de la gama híbrida. Además el portón trasero y los guardabarros incorporan las insignias con la palabra ‘hybrid’, iluminadas en los adornos situados en los umbrales de la puertas. También existe una pintura exclusiva para esta variante denominada Artic Silver. Toda su carrocería se basa en los principios de construcción ligera con una reducción del 40% por ciento del peso en comparación a las elaboradas en acero.