Además de ser el ganador del Dakar 2011 y medallista en la disciplina de Tiro Olímpico en Londres 2012, Nasser Al-Attiyah (Ford Fiesta RRC) forma parte ya de la historia del deporte por ser el ganador de la última prueba del Intercontinental Rally Challenge. El IRC se extingue para dar un impulso al europeo y por ello el Rally de Chipre disputado este fin de semana tenía un sabor muy especial.
Al catarí no le han flojeado las piernas cuando un desmelenado Andreas Mikkelsen (Skoda Fabia S2000) reducía a casi la mitad su ventaja después de las tres primeras especiales de la etapa del domingo. Pero el noruego de Skoda UK Motorsport volvió a ser víctima de los pinchazos en el antepenúltimo tramo, el de ‘Prodromi’, y ahí dijo ya definitivamente adiós a cualquier opción de lograr la machada de remontar un rally que tuvo en contra desde que arrancó la jornada del sábado.
Ese doble pinchazo agotó las dos ruedas de repuesto que Mikkelsen llevaba dentro de su Fabia Súper 2000 y con el rally perdido y el segundo título del IRC en el bolsillo decidió ceder el volante a su compañero de fatigas en todos estos años, su copiloto Ola Fløene. Y ello a pesar de saber que tenía a tiro su scratch número 100 en el IRC. Un gesto que sin duda le honra.
“Hemos tenido dos años muy importantes con Skoda UK y que me han dado la oportunidad de lanzar mi carrera deportiva. Les estoy muy agradecido”, declaró el noruego, cuyo papel en este agónico Rally de Chipre para él le sirvió para lograr el Colin McRae IRC Flat Out Trophy. “El IRC ha sido perfecto para mí y para el equipo y ahora espero haber demostrado a todos aquello que dudaban sobre si yo era el piloto adecuado para llevar este coche que estaban equivocados con mi segundo título”, añadió con un cierto aire reivindicativo.
Al-Attiyah ha conquistado por segunda vez este Rally de Chipre que ganó ya en 2010 y por ello estaba muy contento. “Ha sido un fin de semana realmente fantástico. Nuestro plan era acabar sin ningún pinchazo y eso es lo que hicimos. Todo ha funcionado bien: los neumáticos, el coche, el copiloto, yo... Todos han hecho un buen trabajo. También estoy muy contento porque voy liderando el campeonato de Oriente Medio. Andreas no tuvo tanta suerte y tuvo algunos problemas, pero es parte del juego. Necesitas mucha experiencia en este rally”, reveló el catarí.
Ya a más de diez minutos Toshi Arai finalizó tercero con su Subaru Impreza R4 STI y con su compañero de equipo en el Tommi Mäkinen Racing, Jarkko Nikara, en cuarta posición. Era la primera victoria de la temporada del japonés en la IRC Production Cup. Sepp Wiegand, que tuvo que abandonar durante la jornada del sábado al romper la dirección de su Skoda Fabia Súper 2000 y se reenganchó esta mañana logró la quinta plaza final a la friolera de 14 minutos del ganador. El alemán dio caza en la última sección al chipriota Savvas Savva (Mitsubishi Lancer Evo IX).
En Producción, además de la victoria de Arai seguido de Nikara y la tercera posición de Savva, el título fue finalmente para Robert Consani y Nicolas Klinger a pesar de que en Chipre participaban con un Renault Clio R3 que no puntuaba en esta categoría sino en 2WD. Pero el austriaco Andreas Aigner, el único que podía arrebatarle el campeonato, sufrió una avería de motor el sábado y aunque se reenganchó y pudo remontar hasta la octava plaza, no logró los puntos suficientes para desplazar a Consani.
En la IRC 2WD Cup Harry Hunt sólo necesitaba alcanzar la meta para asegurarse su segundo título después de que Consani –que también llegaba líder de esta categoría– no pudiera reengancharse por culpa de un problema de embrague en su Renault Clio R3. Aún así el británico se hizo con la victoria con su Citroën DS3 R3T por delante del joven chipriota Panikos Polykarpou (Citroën DS3 R3T) y de otro local, Zacharias Manoli (Honda Civic Type R).
