Tratándose de una etapa como ésta entre la localidad chilena de Calama y la argentina de Salta que se ha disputado por encima de los 3.300 metros de altitud había dudas sobre cómo iban a acusar esa diferencia de presión los motores turbo. Sin embargo Stéphane Peterhansel no he tenido problemas para hacerse con su segunda victoria de etapa en esta edición del Dakar y la que hace 61 en su larguísimo historial en esta carrera.
‘Monsieur Dakar’ ha logrado coger un poco de aire tras la presión ejercida por Nasser Al-Attiyah los últimos días y aunque el catarí se dejó cerca de dos minutos al acabar sexto en una etapa poco propicia a su buggy de dos ruedas motrices sigue a 3:14 y es la principal amenaza del francés.
Eso en lo que respecta a la victoria absoluta porque en la de etapa Peterhansel tuvo que vigilar por el rabillo del ojo a otro buggy, el SMG de su compatriota Guerlain Chicherit que tras varios días sufriendo dolores en sus muñecas, la rapidez de esta especial cronometrada le vino de perlas. A pesar de ello se quedó a 39’’ de este triunfo parcial que de momento es cosa de los Mini All4 Racing de X-Raid o de los buggys del Qatar Red Bull Rally Team.
Tras el vuelco de ayer Robby Gordon volvió por sus fueros y terminó tercero a 1:08 de Peterhansel con el BMW de Orlando Terranova a continuación. Después del desastre del jueves cuando perdió media hora al quedar encallado en las dunas, Nani Roma terminó en duodécima posición esta séptima etapa, la penúltima antes de la jornada de descanso de este domingo. El catalán se mantiene séptimo a más de hora y media en la general.
