Cruz conserva su condición de invicto

El Campeonato de Canarias de Montaña está teniendo un solo color en la categoría de turismos, el azul del Subaru Impreza WRC de Juan Luis Cruz. Tras vencer en San Miguel, Alajeró y Arona, necesitaba un resultado en Gran Canaria y la doble cita de Fataga y San Bartolomé era una buena oportunidad para saldar el trámite y dejar temblando ya el título absoluto. Dos victorias más en las cinco pruebas que quedan –a priori en Tamaimo y Guía de Isora-, y será suyo.

Cruz era el favorito y no falló. Sólo había que verlo arrancar como un cohete en la salida para entender que su Impreza estaba a años luz de los dos coches que podían amargarle el día. Ángel Bello (AudiA4 ST) cumplió con dos segundos puestos y con un detalle de calidad, que fue el retorcido recorrido de Fataga y no el más rápido de San Bartolomé donde más azuzó a Juan Luis Cruz. Miguel Cabral (Mitsubishi Lancer Evo VI) se la jugó con el Audi en la primera de las dos pruebas, pero acabó claudicando por no tener al ciento por ciento su coche.

El Grupo N se lo repartieron Gustavo Bolaños y Jonathan Suárez. El primero se desmelenó en Fataga y lo acabó pagando con un pequeño golpe en la segunda oficial que lo dejó sin podio absoluto y sin poder correr la segunda subida. Suárez se subió a su Evo VIII después de pasarse una semana en cama, por lo que el simple hecho de conservar el liderato del provincial de Las Palmas de turismos ya era un éxito. Ni a él ni a ninguno de sus compañeros se lo puso fácil el calor, que apretó sin piedad desde primera hora de la mañana y llegando en algunos momentos a ‘picar’ los cuarenta grados.

En barquetas, José Manuel González y Julián Falcón quedaron como amigos. Reparto de victorias y puntos pero con un pique sano que mantuvo en vilo a los aficionados hasta la última manga de ambas pruebas. El piloto de La Palma reconoció que en Fataga salió muy condicionado por el accidente que sufrió la pasada temporada, pero no lo suficiente como para quedarse a una centésima de Falcón, que ya puede presumir de ser el único de haber sido capaz de mojarle la oreja esta temporada. Ese segundo bendice el título de virtual campeón regional en esta categoría, éxito que celebró con su sexta victoria de lo que llevamos de año.

El horno de Fataga

Aunque a la Escudería Maspalomas no se le puede achacar nada porque ya hizo bastante con cuadrar el desbarajuste de fechas que propició la entrada del Rally Islas Canarias en el IRC, una solicitud desde este humilde medio: evitemos pruebas en el sur de Gran Canaria en fechas estivales. A las nueve de la mañana el termómetro superaba los treinta grados, de manera que la carretera iba a ser un horno. El reasfaltado de los 4,425 km de esta Subida de Fataga pocas semanas antes de la prueba y ese intenso calor que contuvo una ligera brisa que se levantó entrada ya la mañana, añadieron un plus de dificultad que los pilotos advirtieron desde entrenamientos.

El dibujo que ofreció esta primera toma de contacto fue bastante fiel de lo que iba a ser la carrera. Cruz tomando la batuta de la carrera con 4,5 segundos sobre Ángel Bello (Audi A4 ST) y, con una sola anotación al margen, la inesperada tercera posición de Gustavo Bolaños (Mitsubishi Lancer Evo VII), que superaba por una décima a un Miguel Cabral (Mitsubishi Lancer Evo VI) que salía más preocupado por cogerle el tacto a los neumáticos moldeados con compuesto duro que de hacer tiempos. El lanzaroteño Rubén Curbelo (Mitsubishi Lancer Evo VIII MR) también se le subía a las barbas a Jonathan Suárez (Mitsubishi Lancer Evo VIII) cuya cara era un poema al llegar a meta.

Acabada esta primera escaramuza, empezó lo serio. Primera manga oficial y primer golpe en la mesa de un Juan Luis Cruz que tenía prisa por echar el cerrojo a la primera victoria del día con su 3:09.506, un crono que confirmaba el adiós del viejo récord de Roberto Negrín. Aunque visto desde fuera parece que el Impreza no va rápido, el cronómetro dice lo contrario y los 6,9 segundos que era capaz de sacarle a Ángel Bello eran bastante sintomáticos de la gran superioridad del de Subaru. Cruz se sacudía las manos dejando el primer plano de la lucha a Bello y Cabral, que decidía olvidarse de los problemas de electrónica y de la falta de feeling con los neumáticos y marcaba un 3:16.921 con el que metía toda la presión al tinerfeño, segundo por 497 milésimas.

El cambio de ritmo de Cabral abrió brecha entre la tercera plaza y la cuarta de un Gustavo Bolaños que seguía sorprendiendo por su ritmo. Con el podio a casi 3,5 segundos, redefinía prioridades y preparaba la defensa de un liderato del Grupo N que todavía estaba a buen recaudo, sobre todo porque su 3:20.409 era el nuevo récord de la categoría y Jonathan Suárez se quedaba a casi dos segundos de él. Rubén Curbelo también se descolgaba de esta lucha en la primera oficial pero superando a un Yeray Guadalupe que se situaba ya séptimo con el líder del grupo H, Rubén Padrón, a continuación.

Pero aún quedaba el asalto final y alguna sorpresa. Ajeno a los cambios de guión, Juan Luis Cruz volvió a asestar otro golpe de autoridad en forma de 3:08.229, el récord definitivo y que posiblemente siga vigente algunas temporadas. Ángel Bello también mandaba a paseo la plusmarca de la categoría A2 con un tiempo muy rápido si se tiene en cuenta que Fataga era la que peor debía adaptarse a las características de su Audi. Su 3:11.886 hacía inútil el último esfuerzo de Miguel Cabral que a pesar de limar dos segundos debía conformarse con la tercera plaza.

Bolaños tenía la cruz en esta manga, ya que golpeaba la rueda delantera derecha y perdía cualquier opción de mejorar y, peor aún, de salir en San Bartolomé. Una pena, ya que el nivel demostrado por el piloto del norte de Gran Canaria fue excelente; tanto que el líder del provincial de Las Palmas, Jonathan Suárez no pudo con él y acabó anotándose el grupo N. Tras Jonathan, Rubén Curbelo mejoraba a pasos agigantados y se quedaba a 2,5 segundos como tercero de su categoría.

Yeray Guadalupe confirmó en esta nueva manga su condición de séptimo piloto más rápido de turismos con su Renault Mégane, superado en la general por Rubén Padrón, que vencía en históricos por delante de Miguel Ángel Toledo (BMW 2002 Alpina). El palmero Iván Martín (Honda Integra), cuarto de Grupo N y décimo absoluto, se interpuso entre ellos precediendo un trío formado por el propio Toledo, Noé Armas (Toyota Yaris TS) e Ismael Guerra (Subaru Impreza), que acabó en el mismo segundo. Armas y Guerra compartían condición de debutante. En el caso del primero, estrenando el Yaris con el que correrá la Copa Toyota ENMA en 2011 y Guerra en su bautismo de fuego en esto de las carreras con el Impreza ex Manuel Díaz nada menos.

En Promoción, Ulises Cazorla (Toyota Corolla 20V) se estrenaba como ganador esta temporada relegando al intocable Leandro Santana (Toyota Yaris TS) a la segunda posición a casi dos segundos de él. Otro Yaris, el de José Luis Perdomo, fue tercero.

Y en barquetas, esta vez fue el grancanario Julián Falcón (Speed Car GT1000) el encargado de marcar el ritmo durante la carrera. Aunque parecía que José Manuel González (BRC Suzuki) estaba jugando al despiste, lo cierto es que el recuerdo del golpe de la pasada edición de Fataga que condicionó también su participación en San Bartolomé le hizo andar con pies de plomo. Le costó carburar, pero al final se le escapó la victoria por poco. Falcón, que sabía que su rival es perro viejo, no dejó de apretar y en la segunda oficial marcó un 3:02.131, por si acaso. González, más confiado, llegaba a meta con un 3:02.254, a sólo 123 milésimas de la victoria. Al ver la pizarra de tiempos se echó las manos a la cabeza porque se le había escapado la oportunidad de seguir haciendo pleno de victorias en todas sus participaciones esta temporada, pero podía celebrar que el título regional –al menos según las matemáticas- ya es suyo.

Clasificación final y dossier de tiempos de la XXXVI Subida de Fataga.

Cruz y González, a lo campeón en San Bartolomé

Y después de Fataga, peregrinación hacia Tunte y sólo hora y media después volvían a bramar los motores en su rampa de 5,2 kilómetros, éstos sin reasfaltar. El calor seguía cayendo a plomo y, en la salida, tres bajas: la citada de Gustavo Bolaños, el Renault 5 GT Turbo de Ayose Climent y el BMW M3 de Ányelo Padrón, que había roto motor en la primera manga oficial por la mañana. Volvía Isabel Santana (Renault 5 GT Turbo) tras reparar un palier roto.

El panorama no era muy diferente, pero respecto a la de Fataga, la rampa de San Bartolomé tiene fama de ser más rápida. Este pequeño detalle jugaba a favor de Ángel Bello, sobre todo después de haberse defendido muy bien por la mañana y haber logrado la segunda posición con gran solvencia. Pero la realidad fue que Juan Luis Cruz volvió a volar con el Impreza World Rally Car. Ya en entrenamientos rodó por debajo de su propio récord, a lo campeón y prolongando esta luna de miel permanente con el Subaru en que se está convirtiendo esta temporada. Está tan seguro de sus posibilidades que en vez de sorprenderse de su ritmo, le llama la atención lo rápido que fue capaz de ir en 2006. “Con este coche soy mucho más rápido y la verdad es que me he sorprendido de ver el tiempo que fui capaz de hacer entonces con el ‘S8’”. Aquel año, Cruz se llevó la victoria al imponerse a Armide Martín con el Citroën ZX Kit Car y a Claudio Álvarez con el Peugeot 307 WRC.

Volviendo al presente, la primera manga confirmó el dominio indiscutible de Cruz que, eso sí, sólo rebajaba ese viejo récord de 2006 por 57 milésimas. Ángel Bello, que se quedaba a casi seis segundos, aprovechaba la zona más rápidas de esta rampa para abrir brecha con Miguel Cabral, que volvía a repetir como el tercer piloto más rápido en turismos en esta primera oficial.

Sin Bolaños y algo más despejado, Jonathan Suárez se hizo valer con un 3:22.141 que aunque lejos del viejo récord de Grupo N de Angelino Jiménez lo situaba segundo y medio por delante de Rubén Curbelo. El lanzaroteño sigue confirmando que tiene manos rebajando sus cronos cada vez que se sube al Evo VIII MR y aquí lo demostró aguantando el tipo frente al líder del provincial de Las Palmas de montaña en Turismos.

La segunda manga sirvió para el lucimiento de Juan Luis Cruz que daba otro mordisco a su mejor tiempo y lo dejaba en un 3:05.140, demostrándose a sí mismo que está en su mejor versión desde que se puso a los mandos de un World Rally Car, por lo menos en montaña. Bello hizo lo que tenía que hacer, no entrar al trapo y llevar sano y salvo a meta el Audi A4 ST, pero la imposibilidad de bajar de la barrera del 3:12 estuvo a punto de costarle caro. Miguel Cabral subió esta vez como un cohete rebajando en más de tres segundos su crono de la primera tanda y se quedaba a sólo 1,2 segundos.

Tras ellos, el grupo N se convirtió en un ejercicio de precisión. Tanto Jonathan Suárez como Rubén Curbelo clavaron prácticamente sus tiempos en las dos pasadas, pero con el grancanario un segundo y medio por delante del lanzaroteño como cuarto y quinto clasificado de la general de turismos. Más atrás, a casi 2,5 segundos, otro conejero, Yeray Guadalupe, volvía a meterse entre los mejores con Rubén Padrón (Seat 124) celebrando su cumpleaños con una doble victoria en el Grupo H, ésta vez con más holgura respecto a Miguel Ángel Toledo, noveno. A propósito del piloto del BMW 2002, ha confirmado que se presentará a las elecciones de la FALP para sustituir en el cargo a Juan Ignacio Díaz. Como horas antes, Iván Martín volvía a situar su Honda Integra entre los dos primeros históricos, aunque esta vez metiéndose entre los tres primeros del grupo N.

Santiago García (Opel Ascona SR) cerraba los diez primeros puestos de turismos seguido de Ismael Guerra, más ducho con el Impreza. Noé Armas (Toyota Yaris TS) mantuvo un ‘pique’ muy animado con su paisano Tino Guerra (Hyundai Getz). El ex de la Copa Nissan Micra se llevó buen susto en la segunda manga cuando el pomo del cambio se le desprendió de la palanca y acabó en el suelo haciendo tope con el pedal de freno. Tras Armas, que fue duodécimo, terminaron Javier Castro (Renault Clio Cup) y Ulises Cazorla (Toyota Corolla 20V), vencedor de nuevo en Promoción pero hilando mucho más fino al acabar a sólo ochenta milésimas de Leandro Santana (Toyota Yaris), segundo clasificado en este trofeo.

Y, por último, en barquetas, la victoria de Fataga hizo que Julián Falcón se viniera arriba en San Bartolomé. Aunque lejos del récord de David González (2:58.686), el grancanario fue capaz de mantener el ritmo del nuevo campeón regional. Pero José Manuel González tenía un segundito guardado en el mono y tiró de él en la manga final para establecer un 3:01.311 inalcanzable para Falcón, que tras este resultado se plantea la posibilidad de realizar las pruebas que quedan del provincial: La Pasadilla (6 de noviembre) y Moya (4 de diciembre).

Clasificación final y dosier de tiempos de la XVII Subida de San Bartolomé.