Miguel Fuster ha roto por fin con una larga sequía que duraba desde el Rally Sierra Morena de 2012. Desde aquel lejano otoño de hace dos años el alicantino no lograba vencer y necesitaba un primer puesto que le diera alas en el campeonato y parara los pies de Sergio Vallejo.
El que fuera el gallego de Porsche su mayor rival en este Rally de Ourense pudo influir en las energías que el de Benidorm empleó en atar ese primer puesto que pareció peligrar en los tramos de la tarde. Los GT fueron mejor en esas especiales y Fuster y su copiloto en esta carrera, el madrileño Borja Rozada, llegaron a temer que la ventaja de 45’’ no fuera suficiente.
Pero finalmente los de Ene Watch y Auto-Laca pudieron resistir los ataques de los Vallejo hasta que en el penúltimo tramo obtuvieron un scratch definitivo. “Ha sido un rally muy duro, muy difícil”, explicó Fuster, que aquí corría su tercera prueba con el Ford Fiesta R5 de RMC Motorsport. “He aprovechado los errores de mi rival, esos dos trompos que ha hecho y después he dado todo lo que tenía. Yo no sé correr más, así que espero que la afición haya disfrutado con este rally”, concluyó en declaraciones a Radio Ourense Cadena SER.
Es la sexta vez que logra vencer este mismo rally y la primera de un R5 en el Campeonato de España de Rallies de Asfalto. Con anterioridad, en el pasado, Fuster ganó aquí con un Citroën Saxo Kit Car, un Renault Clio Súper 1.600, un Abarth Grande Punto Súper 2000, dos veces con el Porsche 911 GT3 y ahora con este vehículo de última generación FIA.
Además, los 35 puntos sumados aquí le permiten situarse segundo del campeonato a sólo cinco del nuevo líder del CERA, Sergio Vallejo.