El Campeonato de Las Palmas de Rallies mete una marcha más en Santa Brígida este sábado. Entre los más de ochenta equipos hay interés por ver las evoluciones de Julio Martínez y Carlos Larrodé a bordo del Porsche 996 GT3, un coche con el que ha competido en tres ocasiones esta temporada.
Los kilómetros recorridos en los dos rallies más importantes y de mayor calibre de toda la temporada, el Islas Canarias y el Villa de Adeje –además de la Subida de Juncalillo–, han sido de gran ayuda a la hora de acelerar su adaptación, pero cuando se tiene a los mandos un coche del potencial de un GT hay que ir paso a paso. Por ello, del joven Julio sólo hay que esperar que siga avanzando.
“El compromiso que tenemos este fin de semana no es distinto a los anteriores. Debemos seguir adaptándonos al Porsche y aprender en cada prueba que hagamos con él. Es un coche distinto y con bastante potencia. No queremos precipitarnos en ningún momento”, señala con buen criterio Julio Martínez, que finalizó décimo en Gran Canaria y tuvo que retirarse en Tenerife.
Allí, en el Villa de Adeje, ya tuvo como compañero a Carlos Larrodé, si bien en Santa Brígida será la primera vez que corran juntos. Afirma sentirse “ilusionado” de cara a este fin de semana, pero a la vez “mentalizado”, porque no va a ser un rally fácil para un GT, especialmente las dos primeras secciones.
“Como referencia del año pasado, aunque fuese con otro coche, apenas me sirven dos especiales. Es un rally corto en el que hay que mantener la concentración en todo momento. La idea original es ir de menos a más, mejorando en cada repetición de los tramos”, apunta el joven grancanario.