El Rally Sierra Morena puede haber establecido la que ha de ser la tónica general esta temporada: varias unidades R5 compitiendo en igualdad por la victoria. Había mucho interés por medir las fuerzas de los distintos coches y aunque el Fabia R5 de Skoda Motorsport traía unas referencias inmejorables de su andadura en WRC2, su piloto y su copiloto, los gallegos Pedro y Marcos Burgo, pasaron una verdadera odisea.
La razón, un virus estomacal que dejó para el arrastre a los dos hermanos. A base de medicación y suero, aguantaron en carrera en la primera etapa y, ya el sábado, pudieron disfrutar en mayor medida del potencial del Skoda, aunque siempre un peldaño por debajo del trío de cabeza formado por Cristian García, Surhayén Pernía e Iván Ares.
El sacrificio mereció la pena para los del ACSM Rally Team, ya que su cuarta posición supone una buena inyección de puntos en su primera toma de contacto en carrera con el nuevo coche.
“Al final rematamos el rally contentos con el resultado obtenido, a pesar de que nos costó mucho estar en los tiempos de cabeza de la general. Ha sido un fin de semana, y un rally, muy complicado. Muy especialmente el viernes, cuando físicamente no pudimos estar al cien por cien que nos requería una prueba tan dura como lo es el Sierra Morena. Hoy sábado, ya estuvimos mejor y pudimos disfrutar de la conducción del Skoda Fabia R5, y aunque los tiempos no hayan sido especialmente destacables regresamos de Córdoba con muy buenas sensaciones de cara a las próximas pruebas”, declaró el vigente subcampeón de España.
