Parece que el anuncio de Volkswagen en el que se compromete a vender un millón de vehículos eléctricos en 2025 no es exclusivo de esta marca del grupo alemán. Skoda también pone las bases para la construcción de una gama de cinco vehículos 100 por 100 eléctricos en varios segmentos a partir de ese mismo año.
El punto de partida de esta nueva estrategia tendrá lugar con la exhibición del prototipo Vision E que ya fue desvelado en Shanghái a mediados del mes de abril y que ahora desembarca en Europa, concretamente en el Salón del Automóvil de Frankfurt.
Se trata de un SUV coupé de cinco puertas de algo más de cuatro metros y medio de longitud dotado de dos motores eléctricos con una potencia conjunta de 225 kW (306 CV) y capaz de alcanzar una velocidad máxima de 180 km/h. La autonomía es de 500 kilómetros gracias a sus baterías de gran densidad y su eficaz capacidad de recuperación.
El nuevo prototipo también ofrece distintas funciones asociadas a la conducción autónoma -según estudios, un 15% de los vehículos en 2030 equiparán esta tecnología-. Los procedimientos incluidos en éste son operar independientemente en congestiones de tráfico, entrar en piloto automático en autopistas, permanecer en un carril y desviarse, realizar maniobras de adelantamiento, buscar de forma independiente plazas de aparcamiento gratuitas, y aparcar y salir de estacionamiento de forma completamente autónoma.
No son sus únicas características. La interfaz de comunicación se puede utilizar mediante control por voz o gestual. Además cuenta con cámaras que monitorizan constantemente al conductor con capacidad para alertar del posible cansancio de éste e incluso controlar su frecuencia cardíaca capaz, dismunyendo la velocidad del vehículo si el usuario sufre cualquier contratiempo.