Entre los muchísimos pilotos con opciones a asomar la cabeza en los puestos delanteros del Rally Princesa de Asturias, hay uno rebosante de ilusión y ganas. No es el más joven ni mucho menos. Peina canas, sabe ya lo que es hacerse con un título nacional (uno de asfalto en 2006 y uno de tierra en 2007) e incluso ejerció de piloto oficial en el Mundial de Rallies.
Dani Solà se reenganchó a la competición hace un año y lo que en principio fue una manera de matar ese gusanillo que nunca se termina de apagar, ha terminado llevándole de vuelta al Campeonato de España de Rallies de Asfalto al disputar este fin de semana el Rally Princesa de Asturias con un Skoda Fabia R5 de MC Racing rotulado con los colores rojo y blanco de Auto-Laca. No descarten que haya vuelto para quedarse.
Pregunta.– ¿Cómo surgió la posibilidad de volverte a enrolar en una prueba del CERA una década después?
Respuesta.– Desde hace un año volví a participar después de tantos años sin correr con el BMW M3 en alguna prueba de históricos, en Legend y en el rally de casa, en Osona. A partir de ahí se fue moviendo un poco la afición, algún sponsor, etcétera y realmente me ha sorprendido el gran cariño de la gente, especialmente en redes sociales, que en mi momento no había tanto como ahora. Ha sido un boom y estoy muy contento de volver con un coche de última generación. Hace mucho que no corro en asfalto, pero lo afronto con ganas e ilusión.
P.– El entorno no puede ser mejor. Con un copiloto como Marc Martí y un R5 de última generación. ¿Te ves siendo competitivo?
R.– Es un placer poder estar con un copiloto de nivel mundial y campeón de España como Marc Martí. Es la primera vez que estamos juntos también. Con MC Racing y un coche que lo más similar que he conducido es un Abarth Grande Punto Súper 2000 y fue en 2008. Son muchos años y ahora los R5 sorprenden porque creo que son más rápidos que los últimos World Rally Car que conduje, los Mitsubishi y los Ford. Corren menos, pero han mejorado mucho en tracción, en suspensiones y en geometrías. Tengo que adaptarme al R5 y también a los neumáticos que son nuevos para mí. Sé que habrá que empezar despacio y que habrá tensión porque soy una persona que se exige mucho y hacer las cosas bien. Quiero devolver con el mejor resultado posible toda la confianza que han puesto en mí.
P.– Fuster, Ares, Suárez, López, Bulacia, que dio la sorpresa ganando en Cervera hace una semana... Mal rally para volver a competir porque el nivel es altísimo.
R.– Hay máximo nivel en el CERA y gente joven empujando muy fuerte. Lo de Bulacia fue sorprendente. Nosotros estábamos ahí con el Can-Am y me sorprendió cómo aguantó la presión de un campeonísimo como Xevi Pons. Cómo no, Pepe López, que ha vuelto ganando y muy fuerte psicológicamente, o alguien como ‘Cohete’ Suárez, que corre ahora en casa y seguro que quiere dar un golpe en la mesa. Y luego mi compañero Miguel Fuster, que ha vuelto y ha estado ya ganando carreras. Eso me da un poco de fuerzas, porque en el pasado hemos competido y una vez ha ganado él y otra hemos ganado nosotros. Es cierto que sólo hemos corrido contra Miguel, nunca contra los demás, pero lo importante es rodar, coger kilómetros, volver a entender en mi cabeza las notas y traducirlas en velocidad progresivamente. Es un rally difícil por los cambios de climatología.
P.– ¿Qué proyección va a tener esta participación con un R5? Se habla de otra prueba en La Nucía e incluso de una toma de contacto de cara a un posible programa en 2019.
R.– Todo ha salido ‘in extremis’, así que hay que ver esta carrera. Mi experiencia con el coche no va más allá de 50 kilómetros de test y me gustaría intentar hacer otra carrera para poder mejorar el resultado de este fin de semana porque tendré más experiencia y estar más en forma. La Nucía lo he conseguido ganar alguna vez y me encanta porque, además, vas a más ritmo que en Asturias, que es más resbaladizo. Si se puede hacer alguna incursión más yo estaré encantado. A partir de ahí será cuestión de sentarse y ver qué proyección puede haber de cara al año que viene. Si me veo capaz de ganar un título más, intentaré con todas mis fuerzas conseguir el apoyo para seguir.
P.– Da la sensación de que desde que volviste a estar activo con el M3 ha vuelto en ti esa pasión por los rallies.
R.– Ha ido todo surgiendo progresivamente sin forzar nada. Con el equipo que tiene los Can-Am en los raids ha sido una sorpresa porque los coches van muy bien en tierra y he podido hacer muchos kilómetros. Llevo 1.100 km cronometrados, algo que es difícil hacer en el nacional de rallies de tierra. Y esto ha ido bien para rodar y coger ritmo. En la Baja Aragón conseguimos esa inscripción gratuita para el Dakar e intentaremos también estar ahí. El nacional es el nacional y es el lugar en el que hemos crecido. Volver me hace mucha ilusión, especialmente con la gente con la que conseguimos aquel magnífico título en 2006. Evidentemente, ahora es otro momento, pero quizá tenemos la madurez que nos permitirá gestionar las cosas de otra manera. Pero ahora me centraré en Marc, la carretera y el coche para que fluya todo poco a poco y salga lo que llevamos dentro.