Sébastien Ogier ha tomado la iniciativa desde el principio de cara a la gran final del Mundial, haciéndose con el mejor tiempo esta mañana, en el tramo de pruebas del Rallye de Australia, que se ha celebrado, de momento, sobre un firme arenoso y polvoriento, aunque se avecinan lluvias a partir de mañana.
Seb ha aventajado por dos décimas a Andreas Mikkelsen, el único piloto que ha conseguido inmiscuirse entre los tres aspirantes al título, después de haber aprovechado más que nadie la sesión, completando un total de seis pasadas (una más que su compañero de equipo, Thierry Neuville) a la especial de 5.07 kilómetros que ha ejercido como último shakedown del año.
El belga se ha clasificado a dos décimas de Ott Tänak, que ha empatado a la décima con el noruego de Hyundai. Craig Breen se ha situado cuarto, a medio segundo del piloto de Sankt Vith. Tras él se ha situado la gran esperanza de la afición local, Hayden Paddon, y sus adversarios directos para este fin de semana en el que Hyundai se juega el título de marcas con Toyota: Jari-Matti Latvala y Esapekka Lappi.
Teemu Suninen y Elfyn Evans han completado las diez primeras posiciones, a casi un segundo y medio de su jefe de filas en M-Sport, que dejará de serlo, definitivamente, el próximo domingo, cuando finalice un rallye donde, de entrada, tiene muchas posibilidades de poder festejar su sexto Mundial.
En lo concerniente al WRC2, dominio de los chilenos Alberto Heller y Pedro Heller, que han liderado con autoridad una categoría con todo el pescado ya vendido antes, incluso, del Cataluña, que se ha quedado en cuadro para esta cita al contabilizar solamente cuatro participantes.