Los augurios de Tommi Mäkinen se han cumplido: el Toyota Yaris WRC ha calzado como un guante en las manos de Kris Meeke, que esta mañana ha dado la sorpresa nada más subirse al coche nipón, adjudicándose el mejor registro en el tramo de pruebas del Rallye de Monte-Carlo.
El piloto norirlandés ha aventajado por una sola décima al terminar la sesión a otro piloto que estrena montura: el hexacampeón del Mundo y vencedor de las cinco últimas ediciones de la prueba francesa, Sébastien Ogier, que ha precedido en la tabla de tiempos a su nuevo compañero de equipo, Esapekka Lappi.
Ott Tänak ha acabado el shakedown como cuarto clasificado, seguido por Jari-Matti Latvala y Thierry Neuville, el mejor de largo entre los pilotos de Hyundai, con un registro sensiblemente inferior a los que han marcado Andreas Mikkelsen y el nuevo fichaje estrella de la marca, Sébastien Loeb, que han completado respectivamente las diez primeras plazas.
Por delante de ambos se han situado los Ford Fiesta WRC de Teemu Suninen y Elfyn Evans, que han dejado buenas sensaciones en el transcurso de la matinal.