Como los pantalones vaqueros, parece que los crossovers pegan con todo. Da igual el tamaño, las prestaciones, el tipo de sistema de propulsión e incluso si tienen techo o no. El nuevo integrante de esa nueva y extraña especie de los SUV descapotables es el T-Roc Cabrio y llegará a Canarias en los próximos meses.
En realidad, su desembarco estaba programado para el mes de abril, pero es uno de tantos modelos cuyo lanzamiento va a verse retrasado por el COVID-19. A tiempo, en cualquier caso, para recuperar el tiempo perdido en lo que a sol y aire libre después de todas estas semanas bajo techo. Precisamente es eso, el techo, o la ausencia de él lo que hace diferente a esta versión del T-Roc, aunque, a poco que nos fijemos, las diferencias son mucho más profundas.
El diseñador de Volkswagen, Klaus Bischoff, no ha querido limitarse a adaptar el T-Roc, su crossover más personal y deportivo, a los códigos cabrio. Su encanto radica precisamente en ese contraste entre dos mundos que parecen antagónicos y que en este modelo bailan al mismo compás. Las medidas son prácticamente las mismas. Es apenas 36 milímetros más largo y 53 milímetros más bajo, aunque es el maletero el que peor metaboliza esa metamorfosis cabrio del T-Roc al pasar de 445 litros de capacidad a 280 litros. Un daño colateral asumible si se quiere tener uno de los crossovers más originales.
Volkswagen lleva desde 1949 fabricando modelos descapotables, por eso sabe que un verdadero cabrio ha de emplear un techo de lona de riguroso negro; igual que en el Golf cabrio e igual que en el Beetle Cabrio. Son tres capas para un correcto aislamiento y se abre y se cierra en 9 y 11 segundos respectivamente, mediante un motor electrohidráulico que actúa hasta a 30 km/h de velocidad. Volkswagen afirma que se ha puesto especial atención en la elaboración de las juntas de puertas y ventanillas para que el confort a cubierto sea equiparable al del T-Roc convencional.
Por debajo de las ventanillas sin marcos discurre la moldura cromada o –según versiones– oscurecida que, con el techo plegado, hacen más esbelta y plana la carrocería. Esta moldura discurre en paralelo a la línea de carácter que une las ópticas frontal y trasera y a través de los enormes arcos de rueda. El alerón trasero es la guinda a esa zaga rediseñada a medida de esta versión.
Para que la ausencia del techo no perjudique el equilibrio dinámico de este todocamino se han incluido unos refuerzos en la carrocería. A efectos de seguridad, tras los reposacabezas traseros se ocultan unos arcos de protección que emergen en fracciones de segundo al detectarse el vuelco.
El interior tiene una configuración de ‘2+2’ plazas y no presenta cambios relevantes respecto al modelo original. El puesto de conducción tiene un diseño limpio y funcional, con líneas sencillas y la posibilidad de personalizarlo mediante inserciones decorativas en cuatro colores distintos de terminación mate.
Tres versiones
En Canarias, la versión R-Line sólo estará disponible con el motor 1.5 TSI de 150 CV y 250 Nm. Es la más deportiva por aspecto con unos paragolpes específicos y unas llantas de 18’’ de diseño Sebring, pero también por emplear una versión de chasis más firme y disponer del sistema de dirección progresiva y, también de serie, el selector de perfiles de conducción. Esta versión también se diferencia por unos asientos exclusivos vestidos con una combinación de cuero y tela.
Aunque de serie los T-Roc Cabrio con este motor emplean una caja de cambios manual de seis velocidades, cabe la opción de un cambio de doble embrague DSG de siete velocidades. La otra alternativa mecánica, también de inyección directa y sobrealimentada, el la 1.0 TSI de 115 CV y 200 Nm.
Además de la R-Line que establece el techo de versiones, el T-Roc Cabrio también se ofrece en la versión Edition y la Connect, ésta última con un equipamiento más tecnológico que incluye el cuadro de instrumentos virtual Digital Cockpit y el sistema de infoentretenimiento Discover Media que, mediante la integración de una tarjeta eSim que permite acceder a los servicios conectados We Connect y We Connect Plus. Además, esta versión trae consigo un sistema de sonido de la marca Beats con doce canales, seis altavoces y 400W de potencia.
Son de serie en cualquiera de estas variantes del T-Roc Cabrio el sistema de vigilancia Front Assist con función de frenada de emergencia en ciudad; el sistema de detección de peatones; el asistente de frenado anti colisiones múltiples, para evitar colisiones derivadas; y el sistema de aviso de salida del carril Lane Assist.
Con la versión convencional, la R de altas prestaciones con 300 CV de potencia y ésta descapotable, el T-Roc se confirma como un crossover hedonista ideal para volver a disfrutar conduciendo a cielo abierto.
