Si hay una variable que preocupa a los interesados en la adquisición de un vehículo eléctrico esa es la autonomía o lo que es lo mismo, el número de kilómetros que puede realizar el coche con una sola carga. De primera mano hemos comprobado que con una buena gestión de los recursos disponibles y con actitud ahorradora a la hora de afrontar la conducción no es difícil rebajar las cifras de ‘consumo’ incluso por debajo de los valores establecidos por las mediciones oficiales.
Esto es los que han hecho los responsables de Volkswagen con el ID.3 en su acabado “Performance” al recorrer la distancia de 531 kilómetros entre Zwickau y Schaffhausen sin ‘repostar’. Hay que señalar que los datos oficiales de autonomía equipado con batería de 58 kWh como es el caso es de 420 kilómetros en ciclo WLTP. El trayecto, explican, se realizó por carreteras públicas y autopistas y al volante se encontrata el “hypermiler” Félix Egolf, término referido al conductor experto de vehículos de producción en serie con técnicas que maximizan la eficiencia y minimizan el consumo.
El viaje, señalan, “no puede compararse exactamente con los viajes diarios”, pero demuestra la practicidad diaria del ID.3. Cómo se explica. Félix levantaba constantemente el pie del acelerador dejando que el vehículo se desplazara por inercia. En los tramos de autopista a veces utilizaba el rebufo de los camiones que viajaban delante de él. El peso, por otro lado, no era el ideal: el peso adicional del cámara más el equipo técnico llevó la carga útil total a unos 250 kilos. Además, los consumidores auxiliares como el navegador, las luces de circulación diurna, la radio y la ventilación funcionaban de forma. Sin embargo, el consumo de energía era de apenas 10,9 kWh/100 km. El índice de consumo estandarizado del ID.3 es de 15,4-14,5 kWh/100 km. La velocidad media fue de 56 km/h y el viaje se completó en aproximadamente nueve horas.
