A partir de esta temporada, el Mundial de Rallycross (WRX) FIA incorpora una nueva categoría 100% eléctrica. Se llama RX2e y es la avanzadilla de la completa electrificación de este campeonato. Los test oficiales se llevaron a cabo en el Circuito de Calafat, en la provincia catalana de Tarragona y el grancanario Pablo Suárez fue uno de los pilotos participantes.
Y lo hizo en calidad de piloto de desarrollo de QEV Technologies, la empresa que está a cargo de estos nuevos vehículos con 335 caballos de potencia y 440 Nm de par motor generados por una batería de 30 KWh con tracción total y un peso de 1210 kg. El objetivo de Suárez es, además de aportar su experiencia como técnico especialista en motorsport, adentrarse en esta disciplina que tiene un largo camino por delante.
“Indudablemente, el RX2e va a sentar un gran precedente –prevé el grancanario–. A nivel de prestaciones, es evidente que la tecnología que integra es vanguardista, y eso en la pista se nota. El año pasado probé en un circuito danés el vehículo de combustible de esta categoría, y puedo decir que el chasis del modelo eléctrico está mejor equilibrado. Gracias al reparto de pesos y la entrega de par instantánea que produce su motor, es increíblemente más efectivo, divertido y espectacular, todo lo que un piloto quiere en su coche”.
Sobre su participación en estos test junto a pilotos como Iván Ares, campeón de España de rallies en 2017, Suárez ha dicho que supuso “una gran oportunidad para conocer mejor el coche” y porque le permitió medirse “con grandes pilotos de rallycross”. “Los tiempos registrados por todos fueron muy competitivos y estuvieron muy reñidos. No es tarea fácil cerrar un presupuesto para correr un campeonato FIA, pero creo firmemente en los valores del proyecto y lo que quiere mostrar a la sociedad. Estoy deseando ser partícipe de una competición tan novedosa como esta, sostenible y 100% limpia, por lo que trabajo duro para agrupar instituciones y empresas que quieran asociar su marca a esos valores, estando presentes en el primer campeonato FIA de rallycross con cero emisiones”.
Los coches compartirán la misma base mecánica desarrollada por la empresa QEV Technologies para la que trabaja Pablo Suárez y las carreras serán al sprint.