A punto de iniciarse una nueva edición del Dakar, Lucas Cruz, el experimentado copiloto de Carlos Sainz, analiza las claves del recorrido y adelanta, será un Dakar muy duro, donde la navegación marcará la diferencia.
Sobre el plano y entre los momentos a tener más en cuenta está la etapa prólogo de tan solo 11 kilómetros en el “Sea Camp”, un campamento situado en la ciudad de Jeddah, a orillas del Mar Rojo que servirá para establecer el orden de salida con vistas a la primera jornada real, un bucle de 600 kilómetros con salida y meta en el Sea Camp.
Posteriormente, tramos estrechos y pedregosos darán paso a un sinfín de dunas en el “Empty Quarter”, un desierto prácticamente inexplorado e inhabitado donde solo hay arena. También habrá una etapa maratón, al final de la cual los equipos no dispondrán de asistencia mecánica. El itinerario de este año cruza el país de costa a costa hasta alcanzar la orilla del golfo arábigo. La meta estará situada en la ciudad de Dammam.
Cruz avisa, “será un Dakar un poco diferente a lo que estamos acostumbrados”. “Para empezar, tendremos una primera semana de carrera dura, con especiales muy largas, donde recorreremos más de 400 kilómetros de media”, explica Lucas sobre una primera mitad de la prueba, que llevará a la carrera desde el Sea Camp hasta Riyad, donde se celebrará la jornada de descanso.
“Después de la etapa de descanso, afrontaremos una etapa muy larga, con casi 700 kilómetros; y luego vendrán los tres días en la zona del Empty Quarter, que van a resultar clave. Allí las etapas no serán tan largas, pero tendremos mucha arena y tramos lentos que reducirán la velocidad. Por ello habrá que plantear una estrategia para estas especiales, porque salir delante nos puede penalizar mucho. Va a ser importante mostrarse estables y plantear estas jornadas de otra manera”, añade.
Lucas también señala como uno de los momentos claves el paso por la tercera especial. “Con un recorrido de montaña estrecho, va a ser complicado para el paso de coches anchos. Adelantar a otros vehículos será muy difícil, y por ende se reducirá mucho la visibilidad debido al polvo que levantarán. Además, en este tramo pedregoso existe un alto riesgo de pinchazo”.
La navegación va a tener un peso importante en el resultado de esta edición. “La navegación se ha complicado, pero confío en que sea una navegación ‘lógica’ y que el equipo de piloto/copiloto con el coche más fiable, quien se muestre más rápido e interprete mejor la navegación, sea el que gane la carrera”, reflexiona Lucas.
Otras circunstancias como el cambio de reglamento que elimina el descanso a mitad de recorrido harán que los competidores no tengan referencias del ritmo de sus oponentes hasta el final de cada especial.
Desde el Sea Camp de Jeddah hasta Dammam, los participantes en el Dakar 2023 recorrerán 8.549 kilómetros, de los que 4.706 serán cronometrados. La especial más larga será la sexta, entre Ha’il y Al Duwadimi, con 466 kilómetros contrarreloj y 877 km contando en tramo de enlac
