Toyota traza su estrategia como compañía en base a su compromiso de alcanzar la neutralidad en carbono plena en Europa en 2040. Para ello y en cuanto política de producto, su programa adopta un enfoque multitecnológico por el cual, y sin renunciar a las ventajas que ofrece el hidrógeno o los vehículos híbridos e híbridos enchufables, reconoce
los beneficios de los sistemas propulsados por batería.
Es en este marco en el que se encuadra su nuevo catálogo de productos, incluido la última edición del Prius, ahora con nuevo propulsor híbrido enchufable como única opción para el mercado europeo, y al que se adscriben otros dos modelos que podrían ver pronto la luz como el prototipo Bz eléctrico y el nuevo C-HR Prologue.
TOYOTA BZ
Diseñado por el Centro Europeo de diseño y desarrollo localizado en Francia, el bZ permite vislumbrar cuál será el libro de estilo que servirá de inspiración para la futura gama de modelos eléctricos de Toyota.
Por sensaciones ya que apenas se revelan detalles al respecto del modelo, descubrimos un SUV de tamaño compacto, con silueta cupé, pasos de rueda muy pronunciados, techo con efecto flotante y carrocería en acabado bi-tono. Algo así como un CH-R de la era eléctrica.
En el frontal encontramos ciertas coincidencias, salvando las distancias, con el estilo escogido para los faros presentados recientemente en la nueva generación del Prius. La sección posterior, por su parte, es un auténtico ejercicio de originalidad en el que destacan detalles como el alerón en dos módulos, la iluminación compuesta por un listón situado en el borde inferior de la luneta trasera que se extiende hasta los hombros del vehículo, y una sección inferior del portón completamente recta.
El desarrollo interior es bastante simple aunque revelador. De ella sobresalen muy pocos elementos, en concreto, el volante de diseño rectangular así como el panel de instrumentos y el display principal, ambas superficies con un ángulo inferior curvado -esto nos lo van a tener que explicar-. El reposabrazos y el panel central, a distinta altura, descansan sobre una sencilla estructura a modo de chasis de bicicleta que permite sacar mayor provecho al espacio interior.
La marca ha avanzado que el equipo de diseño ha incluido algunos elementos de origen sostenible como es el caso de los asientos hechos a base de materiales reciclados. Como rasgo en innovación, el asistente personal a bordo, anuncian, conecta al conductor y los pasajeros con el vehículo por medio de indicaciones sonoras y visuales.
TOYOTA C-HR PROLOGUE
Convertido desde su lanzamiento en todo un fenómeno de ventas, el C-HR inicia con esta segunda generación una etapa en la que tendrá nuevo papel protagonista en la que en términos de propulsión, la variante híbrida tradicional coexistirá con la llegada de una nueva opción de mecánica híbrida enchufable.
Todo apunta a que su llegada al mercado podría producirse a lo largo de 2023 -sin fecha confirmada- y como se observa, su diseño vuelve a insistir en esa imagen transgresora de la que siempre ha hecho gala. Una seña de identidad que ahora se agudiza mediante un semblante aún más intrépido, y la introducción de un nuevo acabado tricolor, con el tono azufre asociado a elementos como el alerón y los embellecedores de los parachoques.
El desarrollo de cortos voladizos y la incorporación de unos grandes neumáticos situados casi en los extremos de la carrocería aseguran la disposición de más espacio práctico en el interior. Además, la existencia de cámaras laterales sustituyendo al retrovisor tradicional augura un nuevo estatus tecnológico al servicio del conductor.
