El coche conectado, eléctrico y autónomo marca el paso a un sector que se debate ante la complejidad del futuro que se avecina. Nacen nuevas fórmulas de movilidad pero no existe una certeza sobre cuál debe ser la estrategia definitiva a seguir.
El marco actual sobre el que asienta los nuevos pilares la industria del automóvil deriva también en nuevos modelos de movilidad, destacando cierta predisposición hacia iniciativas como los servicios de suscripción o la movilidad compartida.
Los continuos avances y la innovación en la industria del automóvil crean sensación de incertidumbre en el usuario. La conectividad, la electrificación y los progresos hacia el vehículo autónomo son un buen ejemplo del rápido proceso de transformación que afecta al sector. En este contexto, estudios recientes señalan que al usuario le cuesta seguir el ritmo de esta evolución, y ante las dudas, se prioriza menos el tener un coche en propiedad. La alternativa, en el mejor de los casos y entre otras opciones, se concentran en fórmulas como el renting o el vehículo por suscripción.
El estudio “Eascy: las cinco dimensiones que transformarán el sector de la automoción”, elaborado por PwC, afirma que en 2030, el 35% de los kilómetros en Europa se realizarán en transporte compartido ¿Cómo soportará la industria este cambio de tendencia es, de momento, una incógnita?
Dejar de tener un coche en propiedad y utilizar una fórmula como los servicios de suscripción para disponer de un automóvil solo cuando es necesario ya no es una utopía y con los precios adecuados, podría convertirse en una interesante alternativa. El paso intermedio apunta hacia el renting, un sistema que procura mayor satisfacción en el usuario permitiéndole estar a la última sin que ello suponga grandes desembolsos al tiempo que ofrece la oportunidad de sustituir el modelo cada cierto tiempo.
El status quo se va adaptando pero no a la velocidad deseada ¿O sí? El deseo de progreso hacia una sociedad libre de emisiones contaminantes, donde proliferen los vehículos cien por cien eléctricos es el objetivo, pero de momento parece que tardará mucho en imponerse. El precio de los vehículos eléctricos y el cambio de modelo de negocio deben ir adaptándose pronto a esta nueva realidad y este es el gran desafío.
Fuente: idoneo.com
