La firma de automóviles MG ha sido acogida de buen grado por el cliente canario, las cifras de ventas así lo atestiguan. Las razones son varias. En primer lugar porque sus siglas y emblema nos resultan reconocibles, herencia de una de las compañías con mayor encanto durante buena parte del siglo pasado, cuyos modelos eran muy cotizados por aquella época.
En la actualidad, bajo la tutela de uno de los mayores fabricantes de automóviles de China, la marca fija sus objetivos en ofrecer productos de alta calidad a precios muy competitivos, con la electrificación como gran aliada. Es el caso de nuestro protagonista de hoy, el MG3 Hybrid+, un utilitario de diseño juvenil, de poco más de cuatro metros de longitud, bien pertrechado tecnológicamente, y lo más importante, asociada a una mecánica ‘full hybrid’ que se ajusta a la perfección a la demanda actual de modelos de alta eficiencia en términos de consumo y emisiones. No es la única ventaja, el vehículo se comercializa en las Islas Canarias con un precio de partida de 16.200 euros, lo que sin duda es una excelente carta de presentación.
Presentado hace apenas dos meses por MG Canarias, la primera impresión apuntaba hacia un vehículo preferentemente práctico y ágil, con un diseño bien resuelto, al tiempo que brinda un generoso espacio interior pese a sus dimensiones compactas.
Después del test, a esas sensaciones iniciales podríamos añadir otras como una evidente imagen deportiva, un argumento de peso si lo que se quiere es conquistar al público más joven. Esta está subrayada por el diseño en pico del capó, la parrilla frontal amplia y los estilizados faros de LED. La línea dinámica lateral refuerza su imagen atlética desembocando en una zaga ancha, moldeada por los grandes grupos ópticos y el amplio parachoques que le otorga una vistoza presencia sobre la carretera.
Pasemos al interior. La gama del MG3 Hybrid+ se construye en base a tres acabados, Standard, Comfort y Luxury. Todas tienen en común el uso de materiales agradables al tacto, más seleccionados en el caso de la versión tope de gama de nuestra unidad de prueba. La organización de los elementos de control es cómoda, incluido el pequeño tablero de la instrumentación y la pantalla táctil, compatible con Apple CarPlay y Android Auto para facilitar la conectividad y el uso de aplicaciones.
Más sorprendente, si cabe, es la amplitud a bordo. Cómodo en altura, también lo es el largo de la cabina ofreciendo un espacio generoso tanto a los ocupantes de las plazas delanteras como a los de las traseras. Además, cuenta con un maletero de tamaño aceptable de 293 litros de capacidad, 983 litros con el respaldo de los asientos traseros abatidos, cifras que lo sitúa entre los mejores de su categoría.
Y llegó el momento de iniciar recorrido. El MG3 Hybrid+ está propulsado por un motor 1.5 litros de cuatro cilindros asociado a un motor eléctrico alimentado por una batería de 1,83 kWh de tipo NMC. Los beneficios de la tecnología ‘full hybrid’ en términos de eficiencia comienzan nada más comenzar la marcha al hacerlo en modo eléctrico, respondiendo de manera suave y ágil hasta el momento que se requiere algo más de potencia del propulsor.
La selección de los distintos modos se realiza de forma automática procurando un funcionamiento flexible en función de nuestro estilo conducción o de las condiciones del tráfico dando prioridad siempre el programa más eficiente en cada situación. Esto es especialmente beneficioso en conducción urbana y en términos de economía donde con las paradas frecuentes y los arranques la asistencia eléctrica siempre está presente.
También existe la opción de poder escoger el perfil a nuestro antojo entre tres opciones: Eco, Standard y Sport. Sí, Sport, de deportivo, y es que si hay un aspecto diferencial en la mecánica de este vehículo respecto a sus competidores directos es su elevada potencia y par, 195 CV y 250 Nm. Aun así, el consumo medio se mantiene bastante a raya, según nuestra experiencia, en torno a los 5,2 l/100 km, una diferencia mínima frente a la cifra oficial que lo sitúa en 4,4 l/100 km.
El otro as en la manga del MG3 Hybrid+ es la transmisión automática de tres velocidades asociada al sistema propulsor. Hay que decir que aquí MG lo ha clavado, y es que respecto a las debilidades de los sistemas CVT y multimodal, esta tiene un funcionamiento mucho más silencioso es fases de máxima exigencia. No obstante, no estaría de más revisar los ajustes del salto de marchas del programa Sport.
En cuanto al comportamiento la dirección se muestra ligera y precisa lo que facilita la maniobrabilidad en espacios reducidos o el estacionamiento. La suspensión es suave, absorbe con naturalidad las irregularidades de las calles, incluidos los desagradables badenes reductores de velocidad. En carretera se defiende, sin grandes alardes, conservando la estabilidad en curvas a velocidad moderada y una buena respuesta.
Técnicamente tampoco hay pegas. El vehículo equipa control de estabilidad, asistente de frenado, control de crucero adaptativo, aviso de colisión frontal y asistente en atascos, entre otras ayudas, ofreciendo un importante nivel de supervisión y transmitiendo tranquilidad durante los desplazamiento