Raúl Quesada-Pedro Domínguez y Enrique Cruz-David Rivero han dado todo un espectáculo en la carretera al margen de cualquier otra consideración. El Rally Islas Canarias El Corte Inglés se ha revelado como el escenario idóneo para, en igualdad de condiciones, ilustrar un desafío emocionantísimo entre los equipos que luchan por la categoría R2 en Canarias. Muy lejos quedaban las referencias con los participantes de la ‘Challenge Renault Twingo R2’ descolgados de esta clasificación a las primeras de cambio. Enrique García Ojeda quien a priori debería actuar como moderador en este apartado, se veía sorprendido por Cruz dispuesto a no respetar los galones del cántabro. Un posterior pinchazo en la primera jornada lo apartaba de tener que intentar una machada. Con ello el duelo volvía a estar servido, Cruz y Quesada, Quesada y Cruz, una vez más, cara a cara para escribir un nuevo guión del culebrón por capítulos en el que se ha convertido cada uno de sus enfrentamientos..jpg)
Desde el inicio del rally sorprendía las escasas diferencias en un claro cambio de tendencia con respecto a lo que había sido la tónica hasta el momento. Cruz dominaba en los cronos y Quesada se mantenía a su zaga. Problemas de freno primero y un trompo de Enrique en el último tramo del viernes, situaban a Raúl, todo un lince en la oscuridad de la noche, a 15.4 del tinerfeño al cierre de la primera jornada. Y es que los problemas, de cualquier índole, también forman parte del juego y en este apartado el Ford llevaba ventaja.
Con estas premisas, uno de los puntos calientes en todas las crónicas del sábado fue el protagonizado por ambos. Restaban dos secciones, cuatro tramos, y cualquier cosa podía pasar. El primero para Cruz el segundo para Quesada. La diferencia, 11,2 a favor del gran canario y muchas posibilidades de conseguir lo que hasta el momento casi se había convertido en una quimera. De repente, una penalización de 10 segundos aparecía en el casillero del tinerfeño. En el siguiente bucle se cambian las tornas Quesada da primero y Cruz, desalentado, no consigue recortar la diferencia necesaria en Artenara para superar a su contrincante. Triunfo en la R2 para los de Renault por una diferencia que una vez retirada la penalización por injustificada, no superaba los siete segundos en el cara a cara más intenso que se haya podido disfrutar hasta el momento entre ambos. Los dos pilotos en sus declaraciones barren para casa intentando dar explicación a sus respectivas actuaciones.
Un feliz Raúl Quesada comentaba: “Se ha demostrado que tanto Enrique como nosotros hemos estado en la lucha, algo que es bonito para los espectadores. La ventaja que nos sacaba en el Rally de Santa Brígida no era normal, y en la prueba más importante de Canarias ha quedado patente que hay cosas que no cuadran. No es lógico que nos aventaje en casi un segundo y medio por kilómetro en una carrera y en esta ocasión no fuera así. Hemos corrido dándolo todo en la carretera para acabar como los mejores, lo que finalmente ocurrió, algo de lo que nos sentimos muy felices”, destacó el piloto de Valleseco.
Enrique estaba desolado: “Nunca habíamos sufrido tanto y soportado tanta tensión, ya que no sabíamos si el coche iba a frenar o no en cada curva, pero lo superamos. Es una suerte que estemos en meta. Luego la misteriosa penalización acabó con nuestra carrera”.
