Fue el belga Thierry Neuville, que el jueves cerró etapa como líder a sólo una décima de Guy Wilks, el que marcó la pauta en los dos primeros tramos de la mañana. Con un asfalto altamente irregular y, por si fuera poco, escondiendo
humedades en algunas zonas, el de Kronos Racing estiró su ventaja hasta los 8,6 segundos respecto a Bryan Bouffier. El campeón francés de rallys fue otra de las figuras destacadas en estos primeros compases de la jornada, escalando desde la sexta posición hasta la segunda.
El oficial de Peugeot Sport France coronó su escalada cuando, en el quinto tramo, Neuville sufría un trompo en una zona rapidísima y quedaba atascado sin poder sacar su 207 Súper 2000. El belga perdió el tren trasero al pisar una zona húmeda cuando iba en quinta velocidad y le llevó alrededor de tres minutos sacar el coche de ahí. Bouffier, a pesar de ponerse por primera vez líder de una prueba desde Montecarlo, también pasó su particular trago cuando se topó en mitad de tramo a los coches ‘0’ y ‘00’, haciéndole perder éste último un tiempo muy valioso.
A la conclusión de esta primera sección del viernes, Neuville volvía a ser el más rápido en tramo intentando recuperar posiciones desde la novena. Pero empezaba ya a despuntar el Fabia Súper 2000 con los colores oficiales de Skoda Motosport de Juho Hänninen. El finlandés estaba ya a cola de Bouffier y aunque el de Peugeot se sacudió parte de la presión en la sexta especial, Juho lo superó en la séptima gracias a su primer scratch del rally. En la octava y última, falcaba ese liderato siendo de nuevo el más rápido y poniendo 12,9’’ entre él y Bryan Bouffier.
La jornada de hoy ha estado marcada por la enorme cantidad de pinchazos. Pocos se han librado de ellos y los que lo han hecho se han situado en los puestos altos de la clasificación. Es el caso de Jan Kopecky (Skoda Fabia S2000) a pesar de estar ya a más de un minuto por culpa, en buena parte, de los problemas que sufrió con la dirección asistida de su coche en el tramo final.
Al que le salió más caro el pinchazo fue a Guy Wilks, que pasó de estar en plena persecución de Neuville a ser sexto cuando ‘picó’ una cubierta de su Peugeot 207 S2000 en la cuarta especial. Lo mismo se puede decir del noruego Andreas Mikkelsen (Skoda Fabia S2000), dejándose un minuto en este mismo tramo, aunque pudo desquitarse en el siguiente con su primer, y de momento único, scratch.
Basso, de quinto a décimo
Incluso Neuville pinchó en la séptima especial de este Prime Yalta Rally perdiendo ya de manera definitiva el contacto con las cinco primeras posiciones que completaban en ese momento Mikkelsen –cuarto a 1:33- y Wilks, que cedió al noruego por culpa de otro pinchazo más en ese tramo final del viernes. Esta sucesión de problemas del inglés propició que Toni Gardemeister (Skoda Fabia S2000) se quedara a medio minuto de él en la general, confirmando así su mejor actuación en lo que va de año.
Tras él el estonio Karl Kruuda (Skoda Fabia S2000) superaba en la general, a pesar de los altibajos en el rendimiento de los frenos de su coche, al rumano Marco Tempestini (Peugeot 207 S2000) y a Giandomenico Basso. El italiano también se vio lastrado por problemas mecánicos, primero al quedarse sin dirección asistida y, más tarde, también por fallos de motor. El italiano pasó de la quinta a la décima posición. Este sábado 4 de junio concluirá esta cuarta cita de la temporada del Intercontinental Rally Challenge con otras seis especiales.
