Los participantes han sido recibidos como auténticos héroes a su llegada a la capital de Perú, Lima, con los alrededores de su Plaza de Armas tomada por una marea humana. Todos se lo merecían, incluidos los equipos amateurs, aquellos para los que el simple hecho de verse en la meta es una victoria en toda regla y la medalla que acredita haber completado un Dakar, más valiosa que un oro olímpico. Y entre ellos, los dos canarios inscritos, Pedro Peñate y Jorge Gómez, ambos haciendo por segunda vez de principio a fin el raid sudamericano.
En el caso de Gómez se une el mérito de haberlo hecho de manera consecutiva. La primera en 2011, el año de su debut, pero esta segunda, la de 2012, con mayor solvencia. “Este año por fin he podido disfrutar, corriendo de verdad y no luchando y sufriendo diariamente por los problemas físicos de la costilla rota y por tener que aguantar el constante trasiego de los coches y camiones que me adelantaban. He disfrutado de verdad, dejando correr la moto, sin las limitaciones de 2011, cuando lo que hacía era sobrevivir a cada etapa. Estoy muy, muy satisfecho con el resultado final”, explicó momentos antes de la ceremonia del podio final.
La máquina, una Husqvarna, también ha ayudado. “A pesar de los problemas iniciales del depósito, ha aguantado perfectamente, incluso mejor que yo y el resto del equipo. Todos hemos terminado con una fuerte descomposición intestinal que nos tiene a todos agotados físicamente”, relató el piloto de Vemotor. Respecto a su posición final, en el número 71 de la categoría de motos, Gómez afirmó sentirse muy satisfecho, aunque lamenta que podría haber sido incluso mejor de no haberse anulado un way-point de la etapa de Iquique-Arica, un control de paso obligatorio que afirma que fue uno de los pocos en pasar por él. “Pero bueno, estoy muy contento de haber logrado mi objetivo y quiero dar las gracias a mi familia, mi equipo, los patrocinadores y a todos los seguidores que diariamente me han seguido en mi aventura sudamericana”.
El grancanario disfrutará mañana en Lima de una cena en su honor organizada por uno de sus patrocinadores y de distintas actividades de promoción. El martes por la noche saldrá en un vuelo con dirección a Madrid que aterrizará en la capital de España el miércoles y no será hasta el jueves, o quizá el viernes, el momento en el que el bravo piloto de Vemotor Husqvarna aterrice en el Aeropuerto de Gran Canaria.
