Con sólo diecinueve de los 22 inscritos clasificados, el Campeonato Provincial de Santa Cruz de Tenerife y el insular de la especialidad han tenido un arranque de temporada deslucido. La XX Subida a San Miguel de Abona acusó la inscripción más corta de su historia, aunque tal y como se esperaba, hubo batalla por los puestos de honor. Sin embargo, la lluvia caída en el transcurso de la segunda y definitiva manga hizo que la sangre no llegara al río y las clasificaciones quedaron definidas tras la primera ascensión oficial.
En ella el actual campeón insular de montaña en la categoría de turismos, Nicolás Mesa (Ford Escort WRC) fue quien mejor hilvanó los 5,2 kilómetros de recorrido. En la manga de entrenamientos prefirió no complicarse la vida y cedió el timón de manera momentánea al joven Nauzet Brito, que a sus 21 años se defendía en su estreno con el arisco Porsche 996 GT3 ex Ángel de Castro.
Brito se llevó el mejor crono por menos de medio segundo en esa primera toma de contacto con la carretera de El Frontón. Pero una vez empezó lo serio Mesa puso el modo ‘ataque’ y dio un mordisco de siete segundos a su tiempo para dejarlo en 3:15.201. Con él se merendaba a Nauzet que a pesar de verse liderando la tabla de tiempos en su debut con el Porsche siguió poniendo un pie delante del otro para avanzar en su adaptación haciendo que no le importaba demasiado lo mejor o peor que se les diera a los demás. A 3,2’’ del Ford Escort WRC, el de Porsche caía a la segunda plaza con Iván Armas empujando a poco más de tres décimas de segundo.
Con Mesa disparado en esa primera plaza, habría sido interesante ver la capacidad de adaptación de Brito al Porsche en ese pulso con el grancanario por la segunda posición, pero la lluvia que empezó a caer al arrancar la segunda manga oficial dejó inamovibles las posiciones. Para Mesa, que no pudo completar esa última tentativa por problemas mecánicos, este triunfo -el primero desde El Tanque de 2011- era la mejor forma de armarse de cara a defender su título insular. Para el joven Brito esta segunda plaza era un buen estreno en esta nueva etapa con el Porsche, mientras para Iván Armas era el clavo que quitaba otro clavo, el abandono en el pasado Rally Islas Canarias por problemas mecánicos.
En el caso de Víctor Delgado (Mitsubishi Lancer Evo V), la cuarta posición supo a poco. Fue uno de los pocos capaces de mejorar su crono en el segundo intento y aunque fue por cuestión de centésimas, a sólo 1,7’’ del BMW M3 de Armas en esa clasificación final quizá podría haberle puesto en mayores apuros de no haber empezado a llover. Con su Honda Civic Type R R3 de tracción delantera, Eduardo Quintero se quedó a una décima escasa cerrando las cinco primeras posiciones, las reservadas a los coches de mayor calibre.
Jonathan García (Renault Mégane) debería haber estado flirteando con esos puestos, pero problemas de diversa índole le impidieron tomar la salida en la segunda manga y mejorar un primer crono oficial que ni siquiera fue capaz de igualar el de entrenamientos. De esta forma la sexta fue a manos de Francisco Javier Marcelino (
Peugeot 106 Maxi), ganándole la partida a unos sorprendentes Juan José Tavío (Honda Civic 1.6), a José Luis Méndez (Citroën Saxo VTS) y al propio Jonathan García. El Mercedes 190 de Óscar Manuel Díaz completó el ‘top ten’ de esta XX Subida a San Miguel.
Jesús Ildefonso Lastra (BMW 323I), Francisco Jesús González (Citroën AX), Hilario Oramas (Renault Clio 1.8), Rodolfo Bocchia (Peugeot 106) y Gustavo Bacallado (Toyota Starlet) completaron la clasificación de turismos. [Ver clasificación final XX Subida a San Miguel de Abona]
Entre las CM, triunfo sin paliativos para Jonathan Morales y su nueva Silver Car S2, coche que estrenó también en esta rampa de El Frontón con casi 2,3’’ respecto a Benito Martín, con una BRC. Hubo poca lucha en esta categoría, ya que las diferencias fueron holgadas también entre los Speed Car del tercer y el cuarto clasificado, Fran Suárez y Juan Orlando Méndez.
Foto: Carlos Martín.
