El Campeonato Autonómico de Canarias de Rallys podría sumar un nuevo efectivo. Desde el ‘Isla de Tenerife’ del pasado año no veíamos a Roberto Negrín en un rally y eso se debe a que su equipo ha empleado estos diez meses largos para desmontar por completo su Mitsubishi Lancer Evo VIII y poner así punto final a la racha de abandonos por problemas eléctricos.
“Encontramos el origen de todo y se debía a un cable de la instalación, que estaba partido y le daba mala señal a la centralita. Por eso el caudal de la gasolina era menor a veces”, explica loco de ganas de volver a correr el joven piloto tinerfeño. Además del tiempo inactivo el rendimiento del Evo VIII en el banco de potencia invitan al optimismo. “Con la brida de 36 milímetros dio 386 CV, así que ya es un muy buen coche”.
Dio tantos problemas el Mitsubishi en 2011 que a principios de esta temporada llegaron a estudiar la compra de un ‘proto’ o N1 de similares características al de Eugenio Mantecón. “Pero vimos que el coche no daba resultados y al final decidimos seguir con el Lancer Evo VIII. Lo echamos completamente al suelo y lo hemos hecho de cero. Todo está nuevo. Hasta el último detalle”. Aprovechando que pasaba por quirófano su equipo ha trabajado en el bastidor del Mitsubishi, el motor y también en geometrías. Todo para que Roberto recupere su fama de piloto rápido, agresivo y peligroso.
No le asustan los WRC o los GT inscritos en el Villa de Adeje. Sabe lo que es plantarles cara cuando un rally se complica, así que ahora, con su arma bien afilada, se ve capaz de inmiscuirse en esa lucha por el podio. Un buen resultado podría abrir la puerta a un programa autonómico que, tal y como está el calendario, llega a tiempo. “Todo dependerá de Adeje. Si nos va bien haremos un planteamiento de temporada. Si no, veremos qué pasa”.
Foto: Carlos Martín