A pesar de que la puntuabilidad doble de este Rally de Chipre daba opciones matemáticas tanto a Jan Kopecky como a Juho Hänninen, Skoda Motorsport ha respetado escrupulosamente el reparto de objetivos que estableció a principios de año y Andreas Mikkelsen ya es de facto bicampeón del Intercontinental Rally Challenge.
La ausencia del campeón del ERC (Hänninen) y del nacional checo (Kopecky) dan de forma matemática el título al noruego que en 2012 dará el salto a un Volkswagen Polo R WRC, quizá, desde el Rally de Portugal. Se podría decir que esta temporada Andreas no ha tenido demasiada oposición en el IRC, pero no hay que olvidar que en lo que llevamos de año ha tenido que compatibilizar su programa en este certamen con Skoda UK Motorsport y el WRC con Volkswagen Motorsport. En total cerca de una veintena de carreras.
A pesar del overbooking de pruebas y de tener un futuro inmediato bien encarrilado su idea es hacerse con la victoria en la última cita de la historia del IRC. “Desde principio de temporada establecimos que íbamos tantas pruebas del IRC como necesitáramos para ganar el título. Pero al mismo tiempo he tenido un programa en el mundial con Volkswagen, así que he estado muy ocupado al competir en alrededor de veinte rallys. Ha sido difícil encontrar la estrategia para terminar siempre, pero cuando tienes tus ocho mejores resultados, entonces puedes presionar de verdad. En Chipre quiero disfrutar del rally y pelear al máximo”, ha explicado Mikkelsen en IRCseries.com.
Parece que lo que peor ha llevado el todavía piloto Skoda es el haber tenido que encarar la temporada casi con la obligación de terminar cada prueba. Frente a las otras alternativas que se manejaban en Volkswagen Motorsport para subir a una joven promesa al Polo R WRC 2013 debía demostrar que es un piloto regular. Por ello en Chipre piensa darse alguna pequeña licencia. “Para ser honesto, todo el año he tenido que pilotar de manera un poco cuidadosa sólo para llegar a meta. No haré ninguna locura, pero por supuesto que lo que quiero es ganar para dedicárselo a todos los chicos del equipo que han trabajado tan duro esta temporada además de a nuestros fans. Un gran rally para terminar lo que ha sido una temporada fantástica”. Mikkelsen promocionará al Mundial de Rallys como el único piloto que ha sido capaz de lograr dos títulos en el IRC.
El Rally de Chipre se caracteriza –además de por ser la última cita y por la doble puntuabilidad– por ser una prueba en superficie mixta que combina asfalto y tierra en una proporción 70/30 y por tanto un rally que suele dar una medida muy clara de la calidad de los pilotos que en él despuntan. Mikkelsen tendrá poca oposición aquí, ya que de los equipos punteros sólo estará el alemán Sepp Wiegand (Skoda Fabia S2000).
Junto a otros nombres familiares del IRC como Yazeed Al Rahji (Ford Fiesta S2000), Toshi Arai (Subaru Impreza R4), Andreas Aigner (Subaru Impreza R4), Jarkko Nikara (Subaru Impreza R4), Marco Tempestini (Subaru Impreza R4), Harry Hunt (Citroën DS3) o Robert Consani (Renault Clio R3) el hecho de que el Rally de Chipre sea puntuable para el FIA Middle East Rally Championship hace que haya nombres como los de los catarís Abdulaziz Alkuwari y MIsfer Almarri con sendos Mini John Cooper Works o Nasser Al Attiyah, que pilotará un Ford Fiesta RRC, unidad similar a la de Khalid Al-Suwaidi. Con el título absoluto ya decidido, sí se decidirán en esta última cita de la historia la IRC Production Cup y la IRC 2WD Cup.
Aunque ingresó en el IRC en 2010 con Nasser Al Atiyah y Andreas Mikkelsen como ganadores de estas dos últimas ediciones, la historia del rally chipriota arrancó en 1970 y en su palmarés hay nombres como Stig Blomqvist, Colin McRae, Ari Vatanen, Waldegard Björn o Sébastien Loeb.
El próximo viernes la prueba arrancará con una ceremonia de salida que se celebrará por la tarde seguida de la súper especial de 3,2 kilómetros que recorrerá parte de Pafos, sede del rally y declarado por la UNESCO Patrimonio de la Humanidad. Este pequeño tramo se disputará a partir de las siete de la tarde hora local, mientras el resto del recorrido se dividirá equitativamente entre las etapas del sábado y domingo con seis especiales cada una. Una de las novedades de este año es la incorporación al recorrido del tramo de ‘Prodromi-Neo Chorio’, de 19,43 kilómetros, que en 2011 se empleó como base del Golden Stage.
