Cuando Ducati pone las manos en harina sus rivales se echan a temblar. Y en este caso la máxima se vuelve a cumplir. ¿Cómo crear una moto con una polivalencia nunca vista hasta ahora en el mundo de las dos ruedas sin perder la seña de identidad de la nueva generación de productos Ducati? La respuesta es Multistrada, un ejercicio de diseño e ingeniería con
el que la marca boloñesa lanza un órdago a los gigantes japoneses. Viene a decirles algo así como “ciao tutti”.
Hasta ahora el territorio de las maxitrail se mantenía dentro de un equilibrio. Cada marca ofrecía un producto diferente en la forma pero similar en el fondo. Más allá de elecciones de tipos de motor o chasis, de estéticas más o menos clásicas o más o menos modernas, nadie había roto la baraja. Hasta que ha llegado la Multistrada 1200.
En su imagen esta Ducati tira la piedra mucho más lejos de lo que la había dejado con la anterior generación de la Multistrada. Hay pinceladas de su gama más deportiva (1098 u 848) y de sus naked más exhibicionistas (Monster y Streetfighter), con la diferencia de que esta trail es cuatro motos en una gracias a una solución tan innovadora como obvia.
Hasta ahora la posibilidad de regular los mapping de motor a través de la piña de mandos había sido algo medianamente exclusivo de las súper deportivas. Una forma de domesticar las motos más extremas y agresivas de cara a incrementar sus posibilidades en el 
día a día independientemente del estado del asfalto o de las condiciones climatológicas. La Multistrada va mucho más allá al inspirarse en la industria de los coches. Tantas posiciones de entrega de potencia del motor Testastretta 1200 como modos de conducción, alterando también los niveles de actuación del control de tracción (DTC en Ducati). Los modos son cuatro:
• Sport: Máxima entrega de potencia (150 CV) y DTC en nivel 4 para expertos.
• Touring: Máxima potencia (150 CV) con una entrega progresiva y un nivel de actuación del control de tracción intermedio (5).
• Urban: Potencia reducida (100 CV) y DTC en nivel 6.
• Enduro: Potencia reducida (100 CV) y DTC en nivel 2 para una baja intrusión.
El set-up se controla a través de un mando de la piña y de la pantalla digital multifunción que, con acierto, adquiere unas dimensiones muy generosas en esta entrega de la Multistrada.
Dos versiones
Estas cuatro opciones de funcionamiento incrementan exponencialmente sus posibilidades en las versiones S Sport y S Touring. La primera es la más deportiva en cuanto a equipamiento con componentes en fibra de carbono y la segunda, la más rutera maletas laterales, puños calefactables, caballete central, etcétera. Pero lo que hace excepcionales a estas dos versiones es que ambas montan un sistema electrónico de suspensión adaptativa en ambos trenes firmada por Öhlins y que es capaz variar la altura total de la moto. Gestionando la precarga y la extensión de horquilla y monoamortiguador, la altura puede pasar de 850 a 800 milímetros según el tipo de conducción que se vaya a poner en práctica, es decir, Sport, Touring, Urban o Enduro.
Y como guinda, un peso de tan sólo 189 kg (record en su categoría), unas cubiertas Pirelli Scorpion desarrollaras para esta moto y más importante todavía unos intervalos de mantenimiento que pasan de 12.000 a 24.000 kilómetros.
