La séptima generación del Volkswagen Golf ha llegado con un pan debajo del brazo. Los numerosos reconocimientos logrados desde el inicio de su comercialización son el premio a una de las generaciones más tecnológicam
ente avanzadas. De su éxito se ha beneficiado también su prole que este año recupera para la causa la versión monovolumen y que en esta ocasión toma la denominación Sportsvan prescindiendo de la nomenclatura Golf Plus con la se conoció en pasadas ediciones.
El cambio podría estar justificado si atendemos a sus proporciones. La utilización de la Plataforma Modular Transversal ha permitido aumentar sus dimensiones sin perder su esencia de vehículo compacto con el propósito de ofrecer mayor espacio y tal como anuncian sus responsables, una mayor adaptabilidad. En este sentido, son los ocupantes de las plazas traseras los más beneficiados gracias a la mayor distancia existente entre ambas filas de asientos. La banqueta trasera multifunción desplazable individualmente aumenta el volumen de carga en hasta 74 litros.
El Golf Sportvan hereda a su vez la larga lista de soluciones asociadas al Golf con alguna que otra novedad como el Asistente de Cambio de Carril con 
Alerta de Tráfico Trasero Sida Assist a los que se suman otras tecnologías disponibles como el control dinámico de chasis DCC, el Control de Crucero Adaptativo (ACC) que incluye el Asistente Frontal con el sistema de Freno de Emergencia en Ciudad y el Lane Assist.
Para la fecha de su lanzamiento en el mes de junio, Volkswagen Canarias ofrecerá cuatro motores, dos motores de gasolina con las cilindradas 1.2 TSI 110 CV y 1.4 TSI 125 CV, y dos motores diésel 1.6 TDI 110 CV y 2.0 TDI 150 CV. Todas estas motorizaciones estarán equipadas con el sistema Start&Stop y son hasta un 19% más ahorradores que las versiones anteriores.
