Jari-Matti Latvala y su copiloto Mikko Anttila (Volkswagen Motorsport) están a sólo cuatro tramos de añadir a su palmarés su primera victoria mundialista en asfalto. Después de doce tramos y dos etapas, los finlandeses se han afianzado en la primera posición del Rally de Alemania con una diferencia cercana al minuto respecto a Kris Meeke y Paul Nagle (Citroën DS3 WRC).
El de Volkswagen Motorsport supo cargar toda la presión sobre sus hombros para dejar atrás el mal recuerdo de 2013, cuando en idénticas circunstancias perdió el primer puesto en el rally de casa para su equipo en un despiste. Esta vez Latvala no falló y en unos tramos que llegaron a estar muy embarrados se mostró muy rápido y seguro. El resultado: cinco scratch y una ventaja a falta de esa etapa final de 56,6’’ respecto a Meeke.
Dani Sordo y Marc Martí (Hyundai i20 WRC) no han podido evitar que la segunda plaza se alejara rápidamente en el horizonte centrando todas sus energías en defender la tercera frente a las pretensiones de una horda de rivales. Entre ellos sus compañeros Thierry Neuville y Nicolás Gilsoul, que fueron quienes más partido sacaron a la elección de neumáticos duros en la dupla de tramos ‘Arena Panzerplatte’ y sobre todo el ‘Panzerplatte Lang’ de 42,51 km.
Fue en ese TC10 donde el belga pasó por encima del Volkswagen de Andreas Mikkelsen-Ola Floene y también del Hyundai de Sordo y Martí para aferrarse a esa tercera posición. Ayudó el que los españoles hicieran un trompo por culpa de la lluvia en el siguiente, ‘Peterberg 2’, con lo que se iban a más de 20’’. Pero la cabalgada del ex de Citroën y M-Sport no terminó ahí porque su punto de mira estaba ya sobre el DS3 WRC de Kris Meeke.
Quien definitivamente no tiene un sitio en este rally es el campeón y líder del campeonato Sébastien Ogier. Acabó en los viñedos de Mosseland el viernes y la segunda etapa no empezó mucho mejor para él. Trompo en ese primer tramo húmedo y nuevo accidente en ‘Peterberg’. Fue tal el golpe que dejó destrozado un guardarraíl y el tramo tuvo que cancelarse en esa pasada y acortado hasta ese punto ya durante la tarde. Él y Julien Ingrassia fueron trasladados a un centro médico para hacerles un chequeo. No podrán reengancharse porque la jaula de seguridad quedó dañada.
En los cuatro tramos de la última etapa del domingo Dani Sordo tendrá que resguardar su cuarta posición de la amenaza de Andreas Mikkelsen (Volkswagen Polo R WRC), quinto a 10,2’’ del cántabro. Por su parte Mikko Hirvonen (Ford Fiesta RS WRC) deberá defender la sexta de los ataques de su compañero en M-Sport Elfyn Evans y el segundo de los Citroën oficiales, el de Mads Ostberg. Martin Prokop (Ford Fiesta RS WRC) heredó la novena posición en el último tramo después de que Bryan Bouffier (Hyundai i20 WRC) sufriera un accidente.
Saliendo en primer lugar a los tramos después de una primera etapa repleta de incidentes, Robert Kubica impuso su Ford Fiesta RS WRC en dos ocasiones erigiéndose en el mejor de los pilotos de M-Sport. El ex piloto de F1 tendrá difícil pasar de la décima posición que ocupaba al término de la segunda jornada, pero está dando la razón a quienes esperaban de él mucho más que en las ocho anteriores rallies del mundial.
En WRC2 manda el francés Julien Maurin con un Ford Fiesta R5. De estar integrados en esta categoría, Xevi Pons y Álex Haro irían en segunda posición a un minuto.
Lemes, intratable entre los Ford Fiesta R2
En el Drive DMack Fiesta Trophy Yeray Lemes y Rogelio Peñate han seguido con la misma tónica del viernes: liderando y marcando scratch. Hasta cuatro marcaron los canarios elevando a ocho los logrados en este rally y hasta 16 esta temporada. Un buen bagaje que deberá verse reforzado por los puntos de la que podría ser su tercera victoria mundialista tras las de España en 2010 y 2013 dentro del JWRC.
El piloto lanzaroteño reguló en algunos momentos ya que su ventaja respecto a Tom Cave iba camino del minuto y veinte segundos. Lo menos positivo es que el líder de este trofeo, Sander Pärn terminó por dar caza a Guislain de Mevius y Szymon Kornicki y es tercero. Da la impresión de que el estonio ha acudido a esta primera cita de la temporada en asfalto con la única intención de pescar a río revuelto sin complicarse, de hecho en el tramo corto del ‘Panzerplatte Arena’ se hizo con uno de los scratch.
El francés Quentin Gilbert que se salió el viernes volvió a abandonar por problemas eléctricos. Los catalanes Nil Solans y Miquel Ibáñez también tuvieron que bajarse del Ford Fiesta R2 tras sufrir un accidente.
El programa del último día incluye dos tramos, situados al noreste de Trier, con dos pasadas por cada uno: ‘Dhrontal’ (18,03 km) y Grafschaft (19,27 km), que será la Power Stage en la segunda pasada. El rally está previsto que termine en la Porta Nigra a partir de las 14.30 del domingo.
