BMW se sitúa entre los fabricantes con más influencia en el desarrollo de la industria automotriz. Su capacidad para acometer proyectos con visión de futuro forma parte del ADN de la marca. Conscientes de esta responsabilidad, la celebración este año de su centenario ha tenido como uno de sus propósitos principales realizar una reflexión sobre la movilidad en las próximas décadas y cómo encajan sus valores en este nuevo escenario.
Así nace el BMW Vision Next 100, un vehículo preparado para afrontar todas las necesidades del conductor teniendo en cuenta las tendencias y desarrollos tecnológicos que serán más relevantes desde la perspectiva del fabricante. Un vehículo en el que el conductor, tal como lo define BMW, se convierte en "Máximo Conductor" a través de la inteligencia artificial y donde la morfología del vehículo varía -Geometría Viva- para interactuar con el usuario. En este caso concreto, mediante casi 800 triángulos cuyos movimientos coordinados y en combinación con el display frontal, transmiten comunicación subconsciente comprensible para el usuario.
El BMW Vision Next 100 plantea dos modos de conducción -Boost y Ease- una donde los sistemas inteligentes toman el control del vehículo y otra operada por el conductor además de un sistema de conectividad extrema cuyo nombre es toda una declaración de intenciones "Companion", un compañero digital inteligente que conecta el coche y al conductor. BMW ha tenido en cuenta qué materiales serán empleados en la construcción de los vehículos. Tejidos reciclados y elementos renovables para una producción más sostenible.
