Ford debuta en Nueva York exhibiendo el Focus de 4 puertas y el Focus Electric como dos de sus principales novedades. En esta ocasión, el afamado sedán da un paso más en su apuesta por la sofisticación presentando una apariencia destacada con un frontal y una sección posterior totalmente rediseñada. A bordo también se ha rejuvenecido su aspecto con una nueva consola central al tiempo que se introducen nuevos colores y materiales.
Pero los cambios no sólo atienden a su aspecto. Los responsables de Ford hablan de una mayor respuesta y agarre a la carretera mediante la mejora de la rigidez estructural en la parte delantera, la revisión de la suspensión e incorporando un nuevo programa de estabilidad.
En referencia a los dispositivos encargados de asistir al conductor se ha perfeccionado el sistema anticolisión en ciudad Active City Stop aumentando su margen de actuación hasta los 50 km/h, evitando o reduciendo el impacto de las colisiones. Este se complementa con un sistema similar de mayor rango para adaptarse a los recorridos por autopistas o autovías. Ford presenta por primera vez en Europa el nuevo sistema Distance Alert and Indication, que permite a los conductores fijar una distancia predeterminada que les gustaría mantener con el vehículo precedente.
El nuevo Focus será el primer vehículo en Europa en ofrecer SYNC 2. Incorpora una pantalla táctil de 8 pulgadas en color de alta resolución y control de voz avanzado para un acceso más fácil a los controles de audio, navegación y climatización y a teléfonos móviles compatibles.
El Focus seguirá estando disponible con el motor gasolina EcoBoost 1.0 (100 CV y 125 CV) que fue elegido el año pasado por un tercio de los clientes de Focus y fue nombrado el Motor Internacional del Año 2012 y 2013. También habrá una nueva versión del EcoBoost 1.0 de 99 g/km de CO2, el primer coche familiar de gasolina no híbrido en ofrecer emisiones de CO2 inferiores a los 100 g/km.