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No lo llames SUV, es un todoterreno

  • Incluye Terrain Management System con seis programas de conducción

Tras 25 años de ausencia, hace tan solo un par de años Ford decidió recuperar para el mercado americano todo un icono nacido en la segunda mitad de los años 60. Su imagen actual, rejuvenecida hasta el más mínimo detalles, recuerda el estilo del modelo original, inconfundible por sus formas cuadradas, de cortos voladizos, otorgando el mismo simbolismo a los característicos faros redondos y a la parrilla que ocupa todo el frontal con el nombre “BRONCO” en esta ocasión inserto en el centro.

Exteriormente presenta otros elementos de carácter funcional como los pasos de rueda de plástico atornillados y unos soportes en las esquinas anteriores que pueden utilizarse como puntos de amarre. Lo es también por la capota rígida desmontable, como lo son las puertas, dando lugar a una carrocería prácticamente desnuda al más puro estilo de los todoterreno militares de primera mitad del siglo veinte. Lo que no tenían los vehículos de aquel entonces eran unas prácticas bolsas de almacenamiento específicas que se pueden guardar a bordo. Ciertos detalles menos visibles ponen de relieve el mimo en los acabados y la personalización.

Tan importante como su aspecto era poder ofrecer unas verdaderas cualidades todoterreno que permitan tanto a conductores noveles como experimentados sacar provecho de sus aptitudes. El responsable es el Terrain Management System que incluye una serie de programas de conducción, unos para situaciones de circulación convencional como el Normal, Eco, Sport y Resbaladizo, y otros específicos para las travesías off road -Barro/Arena y un modo Baja inspirado en las carreras-. El sistema actúa sobre parámetros como el acelerador, los puntos de cambio de la caja de cambios y la respuesta de la dirección para adaptar su manejo a cada situación concreta.

El Bronco dispone como opción de una caja de transferencia electrónica de dos velocidades que permite cambiar en movimiento, o una caja de transferencia electromecánica de dos velocidades con un modo automático, que permite al sistema cambiar entre la tracción a dos ruedas y la tracción a cuatro ruedas en función de las condiciones. El diferencial trasero con bloqueo viene de serie, mientras que el diferencial delantero con bloqueo y el sistema de desconexión de la barra estabilizadora delantera ofrecen la máxima articulación en condiciones difíciles.

Existen otros recursos, uno de ellos es el Trail Control, algo así como un control de crucero para circulación fuera de carretera donde el conductor, concentrado únicamente en la dirección, puede seleccionar una velocidad de hasta 31 km/h mientras es el vehículo el que gestiona automáticamente la aceleración y la frenada.

El Trail Turn Assist, por su parte, utiliza la vectorización de par basada en los frenos para reducir el radio de giro hasta en un 40% cuando se circula por espacios reducidos, mientras que el Trail One-Pedal Drive permite acelerar y frenar utilizando únicamente el pedal del acelerador, lo que facilita el control preciso de la velocidad cuando se conduce en condiciones difíciles. Las tecnologías de asistencia al conductor incluyen el AdvanceTrac con Roll Stability Control y el Trailer Sway Control para que el conductor se sienta seguro al remolcar.

La estructura sobre la que está construido está a la altura de su desempeño. El chasis de acero de alta resistencia está formado por una caja de siete travesaños para proporcionar una base súper resistente. Cuenta con una suspensión compuesta por brazos oscilantes independientes con muelles de largo recorrido en la parte delantera y un eje trasero sólido de cinco brazos con muelles de largo recorrido de velocidad variable, combinado con amortiguadores de alta resistencia en todo el vehículo. Las llantas de aleación de 17 y 18 pulgadas disponibles están equipadas con neumáticos todoterreno.

A su vez equipa de serie raíles laterales, ganchos de remolque delanteros y traseros además de una barra de techo de acero al boro de alta resistencia equipada con airbags de cortina laterales integrados, además de airbags laterales en los asientos y airbags delanteros.

A pesar de todo lo expuesto, el Bronco es un vehículo de su tiempo y sí, el panel de instrumentos es mitad analógico, mitad digital pero a quien le importa. La pantalla táctil central de 12 pulgadas con sistema multimedia SYNC 4 compatible con las principales plataformas, centraliza las funciones de información, incluido la visión periférica del vehículo a través de un sistema de cámaras 360 grados. Incluye también una plataforma de carga inalámbrica para el móvil en el túnel central y sistema de sonido B&O con 10 altavoces, incluido un subwoofer, que se integra perfectamente con la aplicación FordPass disponible.

Una amplia selección de accesorios fáciles de instalar como una barra de luces para el techo, raíles también para el techo y soportes para el portón trasero, una tienda de campaña para montar encima del vehículo o un toldo lateral permiten personalizar la experiencia de uso de un vehículo construido ex profeso para combatir el aburrimiento.

 

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