SEAT ya tiene su ansiado Tarraco. La marca propiedad del Grupo Volkswagen tiene grandes planes para su todocamino talla XL que cuando se lance se posicionará de inmediato como nuevo estandarte de su gama. Destinado a ser un modelo de conquista para clientes que no contemplaban SEAT entre sus opciones de compra, también explora nuevos senderos de diseño que tomarán los demás vehículos de la marca en los próximos años. La preventa arrancará durante el mes de diciembre.
Por su tamaño, la marca considera que va a poder adaptarse a conductores con estilos de vida muy distintos a la vez que va a seguir cubriendo las expectativas de quienes buscaban funcionalidad, confort, una buena dinámica de conducción, deportividad y accesibilidad. Además de la posibilidad de contar con hasta siete plazas, SEAT le aporta como sólidos argumentos los niveles de equipamiento Style y Xcellence y un diseño de gran personalidad. Mide 4.735 mm de longitud y 1.658 mm de altura.
Esa evolución en el diseño SEAT se aprecia en el Tarraco en la nueva parrilla, los faros en una posición más profunda (sin prescindir de la ya típica forma triangular). La iluminación LED es de serie en los dos niveles de equipamiento y en la parte posterior incluye los pilotos dinámicos. La línea posterior está condicionada en cierta medida por la preocupación de los diseñadores de rebajar el piso del maletero para facilitar su carga.
El interior se pliega a la moda actual de líneas horizontales y limpias para incrementar la sensación de espacio. Como no podía ser de otra manera, está equipado con el sistema Digital Cockpit de SEAT de 26 cm (10,25’’), que permite personalizar la información que recibe el conductor y, en la consola central, una pantalla de 20,3 cm (8’’), desde la cual los ocupantes podrán acceder a las múltiples opciones de conectividad de SEAT. Además, el sistema de info-entretenimiento ‘Navi Plus’ del Tarraco, incorpora por primera vez en la compañía la función del Control Gestual, mediante el cual se pueden controlar algunas funciones con un sencillo movimiento de la mano frente a la pantalla.
Muchas de sus virtudes empiezan en su propio esqueleto, en la plataforma MQB A+ del grupo automovilístico alemán y que se caracteriza por una amplia distancia entre ejes. Con esa plataforma el Tarraco accede a tecnologías como el control dinámico de chasis (DCC) que es fundamental para, a pesar de su tamaño y peso, aspirar a proporcionar unas sensaciones deportivas a quien está al volante. El conductor puede escoger distintos ajustes, aunque el sistema también puede modificar sus características de forma automática.
SEAT ya ha desvelado cuál será su despliegue de motores. En gasolina tendrá dos TSI, un 1.5 con 150 CV y un 2.0 de 190 CV, éste último de la mano de un cambio DSG de siete velocidades y tracción total 4Drive. El flanco diésel estará cubierto con los 2.0 TDI de 150 y 190 CV, y mientras el de acceso tendrá como opción el 4x4 y el cambio automático, el más potente los ofrecerá de serie. La marca ha avanzado que posteriormente se comercializarán “otras tecnologías de propulsión alternativas”.
En asistentes irá bien cubierto con el de cambio involuntario de carril y el asistente de frenada automática de emergencia Front Assist con reconocimiento de peatones y ciclistas, ambos de serie. Los más exigentes podrán añadir el detector de ángulo muerto, el reconocimiento de señales de tráfico, el asistente de atascos (Traffic Jam Assist), el control de crucero adaptativo (ACC), el encendido automático de luces y el asistente de emergencia. Apunta alto en los test de seguridad al añadir también la llamada de emergencia (eCall), el asistente precolisión y la detección de vuelco.