Honda no podía haber escogido mejor momento para reeditar otro de sus modelos leyenda. Y es que tras los recientes lanzamientos de la DAX y la Hornet, la noticia sobre la futura llegada de una nueva Transalp ha sido, quizás, la que ha despertado mayor expectación. Ya está aquí…
Para nuestro gusto, mucho ha tardado, y es que el segmento trail o trail adventure no para de ganar adeptos. Honda está muy bien representada tanto en la categoría de cilindrada media con la CB 500X, como en la parte alta de la pirámide con la Africa Twin en sus distintas versiones, sin embargo, necesitaba cubrir el escalón existente entre ambas donde la competencia, hasta ahora, se había movido a sus anchas. La espera, sin duda, ha valido la pena.
La XL750 Transalp cumple con creces las premisas de moto para todo uso, económica -disponible a partir de 10.795 euros -, valiente en cuanto a su nueva mecánica y con un equipamiento de primer nivel, ofreciendo un salto de gigante frente a sus predecesoras.
Las primeras conclusiones tras la presentación organizada por Honda Canarias en Tenerife y posterior prueba del modelo, donde se alternó una entretenida ruta por carretera con una breve toma de contacto en tierra, no dejan lugar a dudas. La nueva Transalp sorprende, y mucho, para bien, mostrándose como una pefecta alternativa para los usuarios que buscan una moto realmente polivalente, súper manejable y cómoda para el uso a diario, al tiempo que atrevida y satisfactoria durante las escapadas de fin de semana.
Uno de los diferenciales principales frente a sus antecesoras es el motor bicilíndrico “en línea” de 750 cc. Rinde 91 CV (67,5 kW) a 9.500 rpm, y el par máximo es de 75 Nm a 7.500 rpm. Su funcionamiento dista mucho de lo que entendemos como una moto radical. La entrega de potencia es bastante lineal tanto en baja como en la zona media del cuentarrevoluciones, transformándose en una moto con pegada cuando se decide enroscar bien el acelerador.
Todo ello sólo aporta ventajas si quieres experimentar el tránsito hacia las motos de mayor cilindrada de manera natural. Frente a situaciones de tráfico denso, la solvencia del motor permite rodar en tercera y cuarta velocidad -cuenta con seis marchas- a bajas vueltas del motor sin sufrir los incómodos tirones de los motores excesivamente puntiagudos con los que tienes que ir continuamente jugando con el cambio. La altura del sillón al suelo -850 mm-, el peso -poco más de 200 kilos- y su cómoda arquitectura hacen el resto.
En carretera es otro cantar. Siendo exigentes, la nueva trail proyecta un gran equilibrio entre una buena velocidad y un correcto empuje en la zona baja y media del cuentarrevoluciones, gracias también a la tecnología de admisión Air vortex que acentúa la respuesta dando un estímulo extra al motor. Como parte de la experiencia, Honda ofrece la opción del cambio quick-shift cuyo funcionamiento es intachable. La agilidad y maniobrabilidad son sorprendentes, también en tierra aunque como es habitual en estos casos, su uso fuera del asfalto es poco habitual.
Muchas de sus buenas cualidades ruteras dependen en gran media de la nueva electrónica y de sus peculiaridades en cuanto a construcción. La nueva Transalp dispone de acelerador electrónico (Throttle By Wire) y cinco programas de conducción –Sport, Standard, Rain, Gravel y User- interviniendo en el ajuste de parámetros como la potencia del motor, el freno motor, el control de tracción y el anti-wheelie.
El chasis lo conforman un bastidor de acero tipo diamante junto a la horquilla delantera Showa USD SFF-CA de 43 mm y el amortiguador trasero trabajando a través de Pro-Link, ambos elementos ajustables en precarga. Siguiendo la tradición, la rueda delantera es de 21 pulgadas y la trasera de 18 pulgadas montadas sobre llantas de radio. De frenos va sobrada. Esta función se confía a un doble disco delantero de 310 mm, mordido por dos pinzas de dos pistones, mientras que en la parte trasera monta un disco también lobulado de 256 mm con un solo pistón.
El equipamiento se completa con una nueva pantalla TFT de cinco pulgadas con conectividad para dispositivos Android e iOS mediante el sistema Honda Smartphone Voice Control e iluminación LED. Además, dispone de funciones tan prácticas como intermitentes auto-cancelables y señal de parada de emergencia para advertir a los otros usuarios de una frenada repentina.
Honda ofrece distintos packs -Urban, Touring, Comfort, Rally y Adventure- para complementar su equipamiento en los que se incluyen defensas, una cúpula algo más alta, o una posición de asiento más baja, entre otros muchos detalles. Los colores disponibles son el Gris Iridium Mate Metalizado, Negro Ballistic Mate Metalizado y una nueva gráfica tricolor en fondo blanco.