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Falta un solo día para completar los casi 5.000 kilómetros de especiales, repartidos en 12 etapas, que han dado vida y emoción a la edición 2024 del Dakar. Dunas, muchas dunas, rocas volcánicas y pistas pedregosos se convierten por dos semanas en escenario de la prueba de rally raid más dura y selectiva del mundo, hoy también lo ha sido.
El trayecto de AlUla a Yanbu, el penúltimo peldaño entre la decepción y la gloria, ha dictado sentencia, o casi, de cara a perfilar la clasificación final. Los líderes tenían la misión de mantener a raya al pelotón perseguidor, y así ha sido. Ricky Brabec, a pesar de la victoria de etapa de Ross Branch, y Carlos Sainz aprovechando los contratiempos de Sébastien Loeb.
Todo es posible todavía, pero muy mal tendrán que ir las cosas para variar el guión firmado en la etapa de hoy. En motos, con el Honda Team alineado en torno a la figura de Ricky Brabec, sólo quedaba por resolver la cuestión del segundo puesto, al alcance tanto de Adrien Van Beveren, en un gran momento de forma, como de Nacho Cornejo, que empezaron el día a menos de 4 minutos de diferencia con Ross Branch. El caso del chileno se resolvió en el kilómetro 111, punto en el que tuvo que lidiar con su moto para solucionar un problema con la bomba de combustible. Mientras tanto, el piloto de Hero, que había salido en quinta posición, supo aprovechar la situación para subir en el escalafón y se adjudicó su segunda victoria de etapa en estas dos semanas, recortando ligeramente la distancia que le separa de Brabec.
Adrien Van Beveren también mantuvo su tercer puesto, a pesar de un susto cuando se cruzó con un rebaño de camellos que culminó con una aparatosa caída.
Un giro más radical tuvo la categoría de coches. El duelo estaba servido y la especial se convierte en un toma y daca constante, con un Loeb desatado en su intento de limar segundos al crono hasta que un impacto cruel rompió la transmisión delantera derecha en el kilómetro 132, perdiendo toda opción. El piloto de BRX pudo salvar su puesto en el podio, pero se lo debe en gran parte a los problemas también de Lucas Moraes. El brasileño ha descendido del tercer al noveno puesto en la clasificación. El más beneficiado ha sido Guillaume de Mevius que de un plumazo se ha visto subido al podio en segunda posición.
Por su parte, Guerlain Chicherit prosigue su remontada y se coloca en el cuarto puesto gracias a una segunda victoria de etapa consecutiva como abridor. Para subir al podio mañana, Chicherit tendría que sacar 7 minutos en 175 kilómetros a Sébastien Loeb, que sale primero. No es una ecuación sencilla.
En la categoría Challenger, es poco probable que Mitch Guthrie se hunda desde lo más alto de la clasificación con una ventaja de más de 25 minutos sobre Gutiérrez. En cualquier caso, el dúo Cavigliasso-Pertegarini puede intentar un triplete de victorias tras ganar su segunda etapa consecutiva.
Por su parte, Xavier de Soultrait deberá vigilar de cerca a su primer rival en la clasificación, Jérôme de Sadeleer, que se encuentra a 2'49".
En cuanto a los camiones y a pesar de la décima victoria de etapa de su carrera, Aleš Loprais sigue sin bajar de la marca de las dos horas por detrás de Martin Macík, que es quien debería volver a llevar la bandera checa a lo más alto de la clasificación final y lucirla con orgullo en el podio de Yanbu mañana por la tarde.
Foto: Julien Delfosse
