No hay nada imposible cuando se trata de sorprender con mayúsculas a la distinguida concurrencia y de paso conseguir la máxima difusión de un evento que en esencia va dirigido a un escaso elenco de relevantes mortales. Y si no que se lo pregunten a los responsables de la marca de automóviles Lamborghini que realizó la presentación mundial de su nuevo modelo Veneno en la cubierta de un portaaviones de la armada italiana en un puerto de Abu Dhabi.
Decimos esto por un lado, porque de momento y en el transcurso de 2014 tan solo está previsto que se construyan nueve unidades y por otro porque su precio supera los 3,3 millones de euros y eso sin contar el IGIC.
El Veneno es un roadster descapotable con un diseño exuberante y un rendimiento que traspasa los límites de lo conocido. El diseño se ha basado en extremar la aerodinámica y la estabilidad en curvas rápidas con un manejo, según cuentan los que han tenido el privilegio de probarlo, similar al de un prototipo de carreras.
Si, si, no desesperen… La potencia máxima es de 750 CV lo que le permite acelerar de 0 a 100 km/h en 2,9 segundos y la velocidad máxima se encuentra en 355 km/h. El motor corresponde a un doce cilindros y 6.5 litros, equipado con transmisión ISR de cinco velocidades extremadamente rápida. La tracción a la cuatro ruedas es permanente.