Canarias vuelve a ser la gran prueba de fuego de la temporada para los pilotos del Campeonato de España. El mejor barómetro para medir la competitividad de los aspirantes al cetro nacional, máxime ahora que todos ellos, con excepción de Joan Vinyes y Javier Pardo, integrantes del equipo Suzuki, se juegan los cuartos en los tramos de nuestro país al volante de vehículos R5, semejantes a los que va a pilotar la treintena de corredores extranjeros que ha aglutinado la única cita española del Europeo.
Una vez computados los resultados de los dos primeros rallyes, Miguel Fuster, el más veterano del elenco de competidores que van a pujar por el título este año, figura de nuevo como líder del CERA, casi dos años después, a bordo del Ford Fiesta R5 con el que regresó a lo más alto hace tres semanas, en Sierra Morena.
El piloto alicantino, implacable sobre el húmedo y cambiante asfalto de los tramos cordobeses, llega a Gran Canaria con cinco puntos de ventaja sobre el Hyundai i20 R5 de Iván Ares, campeón en título y vencedor de la primera carrera, celebrada en Lalín (Pontevedra), quien ha logrado, con la ayuda de Zé Pedro Fontes, obtener las piezas necesarias para reparar a tiempo su coche, tras el topetazo que se endiñó durante el test del pasado lunes.
El gallego, el piloto del Nacional que más brilló el pasado año en este rallye, encabeza el escuadrón que ha preparado Hyundai para este rallye, cinco cinco unidades españolas en liza: las tres del importador canario, con Surhayen Pernía, Víctor Delgado y Toñi Ponce al volante, la última en llegar, que estrenó Cohete en Sierra Morena, y, por supuesto, la del piloto de Carral, que llega a Canarias con las ideas más claras que en Córdoba, gracias al test que efectuó con su equipo hace dos fines de semana, antes de embarcar el coche hacia el archipiélago.
Todos los integrantes de la marca asiática medirán sus tiempos con la concurrencia extranjera, amén del Ford Fiesta que ha alquilado Luis Monzón, no así el principal rival al que se enfrentan, Miguel Fuster. El único R5 español que no ha formalizado su inscripción en el Europeo, lo que le obligará a salir casi treinta posiciones por detrás de sus adversarios directos, justo por delante de Alberto Monarri. Y aún así, contará con veinte vehículos de margen respecto a los Suzuki oficiales y al Porsche de Enrique Cruz. Un diferencial que puede jugar a favor de unos, o en su contra, dependiendo de cómo y cuándo se desencadenen las tormentas y/o neutralizaciones que puedan producirse en el transcurso de la carrera.