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Toby Price, con la sartén por el mango

  • Mañana la salida se dará en orden inverso a la general

Restan 414 kilómetros de etapa, 136 de ellos cronometrados, y es verdad que la historia siempre nos recuerda que hasta que no se supera la línea de meta cualquier cosa puede pasar. Pero solo el infortunio podría apartar a Toby Price de su segundo entorchado como ganador del Dakar (el primero lo consiguió en 2016). Su principal rival da la casualidad que es su propio compañero de equipo en las filas en el Red Bull KTM Factory Racing, el argentino Kevin Benavides.

Si alguien se pregunta si puede haber órdenes de equipo es que no ha visto lo que ha venido ocurriendo días atrás. Ninguno a dado su brazo a torcer, hoy tampoco. En la general, la distancia en tiempo entre ambos es de tan solo 12”, algo inusual a estas alturas del rally. Después de unos 3.900 km de crono, los separa apenas un suspiro, una distancia que vigilarán de cerca en la etapa final de mañana con Dammam como destino.

Skyler Howes, relegado por el dúo de KTM a un papel secundario, aún no tira la toalla, pero ese minuto y treinta segundos que lo separan de Price pasan en un suspiro. Sobre todo teniendo en cuenta el orden de salida particular de la última especial, siguiendo el sentido inverso de la general.

Desde luego, ese tipo de tensión no es lo que sentirá Nasser Al Attiyah. El piloto catarí está más cerca de conseguir su quinto título pese a la oposición de un Sébastien Loeb desatado que, aunque hace añicos las estadísticas, sigue a 1h21’ de la que sería su primera victoria en la general. El francés se ha llevado los titulares de casi toda la semana, y su récord permanecerá, suponemos, durante largo tiempo dentro del amplio anecdotario que acumula el Dakar, pero hasta ahí. Al-Attiyah será el hombre que se lleve todos los honores si no pasa nada inesperado.

En T3, Mitch Guthrie se ha copiado de Loeb y ha acumulado su propia colección de etapas (5 este año, 7 en todo su palmarés), pero Austin Jones sigue siendo intocable con una ventaja de 50’ sobre Seth Quintero, y lo mismo ocurre con un Alexandre Giroud al que le traen sin cuidado las 4 victorias de etapa consecutivas de Marcelo Medeiros.

En T4, el benjamín del Dakar, Eryk Gocza?, se hace con su cuarta etapa y se acerca a Rokas Baciuška, líder bajo presión pero estable desde la 7ª etapa.

Por su parte, Janus van Kasteren podrá respirar tranquilo cuando eche un vistazo a la clasificación del día: los sinsabores de Martin van den Brink dejan como perseguidor más inmediato a Martin Macík, a la friolera de 1h16’.

Queda aún la decimocuarta y última etapa. En total serán 267 kilómetros de enlace a los que hay que sumar 138 más cronometrados a orillas del Golfo Pérsico en una especie de homenaje al Dakar original, cuando la carrera tocaba a su fin en la playa del Lago Rosa, en Senegal.

Foto: A.S.O./H.Cabilla

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