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Admitámoslo: hay pocas alternativas para ver a Yeray Lemes y Rogelio Peñate con un programa deportivo internacional coherente y con proyección. Sin más apoyo económico que el de ese grupo de empresas que quisieron subirlo a un Súper 2000, es inviable abordar siquiera el rally de casa con un coche de esta categoría ‘pata negra’ y sin margen de error posible, quemar el único cartucho a principios de año parece algo insensato.
El sueño del IRC o el SWRC fue eso, un sueño y ahora toca restregarse los ojos y desperezarse para volver a levantarse. El entorno de Lemes sigue resistiéndose a un programa nacional, pero algo que parecía totalmente descartado ha empezado a verse con otros ojos a raíz de una carta recibida la pasada semana. En ella Malcolm Wilson, patrón de M-Sport –empresa que lleva buena parte de los designios deportivos de Ford en los rallys y, muy importante, nuevo promotor de la WRC Academy- invitaba al canario a volver a disputar esta categoría de acceso al mundial.
Es lógico que M-Sport esté intentando incentivar su propia ‘copa’ con los Ford Fiesta R2. La misiva estuvo precedida por una consulta del equipo isleño sobre los nuevos requisitos para poder participar y Malcolm Wilson sabrá perfectamente que no hay mejor gancho que un escrito alabando a un piloto con su firma a pie de página. Posiblemente Yeray no haya sido el único en recibirla, pero el que en ella se repase su trayectoria durante 2011, con detalles que implican que saben quién es y por qué llegó a Gales prácticamente sin opciones de ser campeón, ha supuesto una pequeña inyección de ánimo.
Rogelio Peñate, su copiloto, ha explicado en Radio Canarias qué les ha llevado a reconsiderar la WRC Academy. “El panorama no es nada alentador. Hay que pensar más allá de 2012 por cómo está la situación económica y lo único que nos garantiza un programa en 2013, siempre que la ganemos, es esta categoría”. Y es que con la entrada de M-Sport en sustitución de North One Sport el premio de 500.000 euros para el ganador se ha sustituido por una temporada al completo con un Fiesta R2 o cinco pruebas del SWRC con un Fiesta S2000.
También la modificación de los requisitos que deben cumplir los pilotos ha hecho que las puertas de ‘la Academia’ se abrieran para Yeray y Rogelio de nuevo. “Teníamos la duda porque, anteriormente, había un límite por el cual los pilotos sólo podrían haber hecho un máximo de siete rallys del mundial. A partir de este año se mantienen los siete, pero como piloto prioritario”. El lanzaroteño lleva trece pruebas mundialistas ya entre el JWRC y la WRC Academy –“doce más uno” dice Peñate-, pero se queda justo en el linde con siete carreras como prioritario.
Seis pruebas
Hay 18 plazas y M-Sport ha afirmado que tiene 23 “potenciales participantes”. El calendario repite con seis pruebas puntuables, arrancando de nuevo en Portugal entre el 29 de marzo y el 1 de abril, y siguiendo con Acrópolis (Grecia), Finlandia, Alemania, Francia y, como novedad, España. Todas conocidas para el dúo isleño, aunque con ello, la alternativa de correr en Alemania con un Skoda Fabia Súper 2000 también quedaría aparcada. “Con la decepción de ver que no estábamos entre los elegidos para seguir probando y con el proyecto del apoyo de las empresas canarias, pensamos que lo mejor era ir ahí y demostrar que se habían equivocado ganándoles a todos. Pero aunque lo consiguiéramos, quizá no podríamos hacer nada por cambiar las cosas”, explicó el copiloto grancanario.
Respecto al hecho de que dos pilotos alemanes como Sepp Wiegand o Hermann Gassner Jr sí hayan podido encontrar acomodo en algún programa deportivo al calor de Skoda, Peñate lo achaca a la distinta coyuntura económica de uno y otro país. “En Alemania están saliendo de la crisis y nosotros estamos en una situación muy delicada. Aunque hay marcas que moralmente nos quieren apoyar, no pueden hacerlo económicamente. A nosotros sólo nos queda agradecerle todo aquello que han hecho por nosotros de aquí hacia atrás”.
Así las cosas, la opción de verlos en un Fabia S2000 en Canarias es, como explicamos la pasada semana, poco probable ya que se quemaría el poco presupuesto disponible en un único disparo. Sin embargo, sea como sea, Lemes quiere correr el rally de casa, sobre todo porque a un par de semanas de Portugal sería la mejor forma de entrar en calor. De decir que sí a la WRC Academy, lo más sensato sería subirse a un Ford Fiesta R2.
