En todos los sentidos, ésta ha sido la edición más difícil del Rally Islas Canarias. Por lo menos que se recuerde. Luis Monzón decía en la meta del tramo de Arucas que había sido el rally más difícil que había corrido en su vida y, tras él, otros pilotos con galones como Andreas Mikkelsen hablaban de “pesadilla” en lo meteorológico. Si a eso le sumamos el hecho de celebrarse desligado del corazón que aportan los aficionados y de los otros mil y un condicionantes que han afectado a su organización en tiempos de COVID, para lo bueno y para lo malo, la edición número 44 será recordada durante mucho tiempo.
Para empezar, por la victoria de Adrien Fourmaux y Yoann Bonato (Ford Fiesta R5 MKII), ganadores absolutos gracias, en buena medida, a haber sabido navegar cuando el rally se volvió más loco. Si la primera etapa había parecido ‘fuertecita’ en cuanto a emociones, la segunda empezó con un bucle loco. El tramo de Gáldar, especialmente sus últimos metros, puso el rally patas arriba y condicionó todo lo que vino a continuación.
Nil Solans y Xavi Moreno (Skoda Fabia Rally2 Evo), que habían salido de su asistencia con una sola rueda de repuesto, sufrían un doble pinchazo justo en el tramo en el que habían sido capaces de recuperar el liderato que le arrebataron primero Iván Ares y, a continuación, Adrien Fourmaux. El catalán, que había mordido el anzuelo de luchar por la victoria europea, se echaba las manos a la cabeza al ser consciente de la situación.
Completó los tramos de Moya y Arucas con una rueda pinchada y en esas condiciones la pérdida de tiempo fue fatal para sus opciones no ya a hacer un papel destacado en el ERC, sino para conquistar el Supercampeonato de España de Rallies.
Iván Ares y David Vázquez (Hyundai i20 R5) también salieron heridos de esa primera sección. Primero por un pinchazo en Gáldar y, más tarde, con dos impactos que acabaron doblando el puente derecho izquierdo de su coche. Se rehicieron, pero ya entonces Adrien Fourmaux y Renaud Jamoul (Ford Fiesta R5 MKII) eran inalcanzables.
Sin grandes alardes, el oficial de M-Sport en WRC2 se las arregló para no cometer grandes errores. Apenas un largo en la meta de Gáldar que pocos evitaron y que dañó el frontal de su coche. Conduciendo fino, completó los tramos finales para hacerse con su primera victoria en el ERC con 25’’ de ventaja final.
Doblete francés tras una etapa, la primera, en la que parecía que los españoles tenían la sartén por el mango. Yoann Bonato-Benjamin Boulloud (Citroën C3 R5), autores de dos scratch en esta etapa, se apostaron en la segunda posición manteniendo siempre distancias con Ares y Vázquez, que repetían el podio continental del Rally de Fafe Montelongo.
Alexey Lukyanuk celebró con frialdad su segundo título en el ERC. El ruso se lamentaba de no haber sabido ser lo suficientemente rápido para despegar en la clasificación y alcanzar el campeonato desde la séptima posición parecía saberle a muy poco. Todo lo contrario que Oliver Solberg-Aaron Johnston (Volkswagen Polo GTI R5), que lanzaban los puños al cielo en Arucas celebrando su primer título internacional, el de ERC1 Junior, desde la cuarta posición final.
Tras el joven sueco, decepción. José Antonio Suárez y Alberto Iglesias se quedaban a las mismas puertas del título en el Campeonato de España de Rallies de Asfalto. Con el saco de segundos que le cayó en la primera sección del sábado, sus cuentas pasaban por ser segundo y marcar el mejor tiempo en el TC+ de Arucas. Primero Surhayén Pernía-Edu González y, a continuación, Pepe López-Borja Rozada mejoraban su tiempo y hacían inútil el esfuerzo de los asturianos, que eran quintos de la clasificación absoluta.
A pesar de su remontada en esta segunda etapa, Andreas Mikkelsen y Anders Jaeger no han sido todo lo rápidos que se esperaba de ellos. Los noruegos marcaron dos scratch en la última sección alcanzando al final el techo de la sexta posición por delante de Alexey Lukyanuk-Alexey Arnautov (Citroën C3 R5) y Callum Devine-James Fulton (Hyundai i20 R5).
Ninguno de los equipos canarios logró la gesta de disputar la victoria en este Rally Islas Canarias. Luis Monzón y José Carlos Déniz (Citroën C3 R5) y Yeray Lemes-Rogelio Peñate (Hyundai i20 R5) lanzaron sus dados en los primeros tramos, pero la lotería del tiempo acabó imponiendo su ley. Monzón fue el mejor de los nuestros en novena posición final absoluta, tercero en el nacional de asfalto y vencedor de la última prueba del Campeonato de Canarias de Rallies de Asfalto.
Enrique Cruz y Yeray Mujica (Ford Fiesta R5 MKII) podrían haber aspirado a un ‘top ten’ continental, pero el accidente que sufrieron en el barrizal de la meta de Gáldar –tramo que se recortó 800 metros en la siguiente pasada– le costó alrededor de un minuto.
